Palencia
Los vecinos del edificio de la calle Padilla avanzan en la rehabilitación de las fachadas con riesgo de derrumbeTras apuntalar la estructura, apuestan por instalar un armazón de hierro y solicitar un préstamo de 600.000 euros para las obras
Los vecinos del número 2 de la calle Padilla, en el barrio de Pan y Guindas, que corre el riesgo de derrumbe de sus fachadas ... han dado un importante paso en la búsqueda de soluciones para garantizar la seguridad de la estructura. En las últimas horas, se han llevado a cabo trabajos de apuntalamiento en la zona más comprometida del inmueble, una medida de emergencia con la que se pretende mitigar el riesgo de desprendimientos hasta que se acometan las obras definitivas.
Durante la mañana de este pasado martes, los residentes en el inmueble se reunieron con el concejal de Urbanismo, Álvaro Bilbao, para abordar la búsqueda de alternativas viables que permitan afrontar la rehabilitación del edificio. Previamente, la comunidad de propietarios se había reunido también el pasado 17 de febrero para estudiar todas las posibilidades, antes de presentar su proyecto definitivo al consistorio. La reunión contó con una nutrida afluencia de vecinos, quienes mostraron unanimidad en la decisión tomada, la instalación de un armazón de hierro que rodee la torre y fije la estructura. El proyecto fue presentado al Ayuntamiento el pasado viernes, después de que se les concediera un día más de plazo para su entrega.
La solución acordada implica la solicitud de un préstamo de 600.000 euros para sufragar las obras. No obstante, los pagos se realizarán de manera escalonada, según lo que vaya gastando el constructor en cada fase del proyecto. «Si, una vez realizadas dos fachadas, el edificio está fijado, pero faltan pagos de los vecinos, se quedará así. Si la cuota la paga todo el mundo, se hará todo el edificio. De momento, la prioridad es arreglar lo que nos ha requerido el Ayuntamiento», explica uno de los residentes afectados.
El deterioro del inmueble, que viene generado gran preocupación entre los vecinos desde hace meses, se ha agudizado en los últimos meses, lo que ha llevado a la colocación de vallas y carteles de advertencia, debido al peligro de desprendimiento de una parte de la fachada. Ante esa situación los técnicos de la Concejalía de Urbanismo elaboraron un informa en el que determinaban la existencia de un riesgo inminente de derrumbe en la fachada suroeste del bloque de 44 viviendas. En el informe se exigía una actuación urgente y se decretaba la clausura de algunas de las estancias de las viviendas.
Con el compromiso de los vecinos y las acciones ya iniciadas, la comunidad espera que este plan logre estabilizar el edificio y disipar los temores que han marcado el día a día de sus habitantes en los últimos años.
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