Olleros de Pisuerga cumple fiel a su cita y reparte 1.500 raciones de paella

Siempre hay gente nueva, pero son muchos los que repiten. «Porque saben que ofrecemos productos de primera calidad, cuidamos mucho tanto la preparación previa como la cocción, que debe tener su tiempo adecuado, al igual que el rato de reposo una vez que se la retira del fuego, para poder así entregarla en su punto», explicaba José Enrique Cabria, presidente de la Asociación de la Gran Paella Ollerense, colectivo que cada año organiza este entretenido y concurrido evento.

La Paella de Olleros de Pisuerga, declarada de Interés Turístico Regional desde el año 1993, ya ha cumplido 45 ediciones y es una cita obligada para los habitantes de la comarca y los veraneantes. Nadie quiere perdérsela porque «les damos buen ambiente, un trato agradable y una paella excelente». Y la celebración sobrevive gracias al trabajo y esfuerzo de estos vecinos, que se enorgullecen de que su pueblo de 50 vecinos sea conocido en toda España por su paella y que sea visitado por tanta gente.

En esta edición se escucharon muchos acentos procedentes de diferentes puntos de España y de Latinoamérica, y muchos idiomas de otros países europeos, como italiano o ucraniano. «Se ha notado la llegada de muchos extranjeros este año, muchos de los cuales nos han pedido hacernos una fotografía para enviar a sus países de origen», señalaba Cabria.

Como en los últimos años, se volvieron a suministrar casi 1.500 raciones. «Se preparan siete paelleras de 240 raciones, pero nosotros somos generosos sirviendo y damos unas 200 raciones de cada una, por eso se reparten unas 1.400 raciones», aseguraba José Cabria. El menú se prepara a fuego lento con 250 kilos de arroz, 250 kilos de pollo, 220 kilos de marisco (cigalas, langostinos, gambas, berberechos, anillas de calamar y mejillones), guisantes y pimientos. La hoguera se aviva con leña de roble, escogida con mimo para este fin, pues ofrece aún mejor sabor a la paella.

Una exquisita paella a 5 euros cocinada este año por 14 cocineros, algunos de los cuales son jóvenes y «tienen mucha ilusión». También cuentan con la ayuda de nuevos vecinos que se animan a echar una mano para que todo salga lo mejor posible en esta celebración.

«Queremos agradecer la colaboración de la junta vecinal, del Ayuntamiento de Aguilar de Campoo y de la Diputación Provincial de Palencia», reconoció el presidente de la asociación, que también agradeció que el viento hubiera cesado ya que «es más molesto y peligroso que las altas temperaturas porque te llena de ceniza los ojos y te quema el rostro».

Pero no solo de paella está hecha esta fiesta, ya que la deliciosa gastronomía estuvo acompañada de música con los dulzaineros por la mañana y por la tarde amenizó el baile popular en la campa el conjunto aguilarense 'Grupo Delta'.

Asimismo, se disfrutó de una exhibición de tiro con arco del Club Aguilarco, de bingo y también de hinchables gratuitos para los niños. Además, el público tuvo la oportunidad de entrar y admirar su iglesia rupestre de los Santos Justo y Pastor, una extraordinaria joya del románico de la Montaña Palentina.

La fiesta continúa este lunes con la degustación del pollo a la ollerense y de tortillas que se repartirá, de forma gratuita, entre los asistentes hasta el final de existencias. Del mismo modo, contará con verbena, el tradicional baile de la patata, la celebración de un bingo y chocolate para todos.