Borrar
Un magnicidio con fusiles de precisión que cumplen la ley

Un magnicidio con fusiles de precisión que cumplen la ley

Murillo tenía licencia de armas cortas y de tiro deportivo

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Jueves, 8 de noviembre 2018

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La idea de Manuel Murillo Sánchez era recurrente. No quería perpetrar una matanza, aunque tenía dos armas automáticas de guerra ilegales. Quería emular a Lee Harvey Oswald en el asesinato de John F. Kennedy en Dallas en 1963. Acabar con la vida del presidente con un disparo de fusil con mira telescópica. Tenía en casa cuatro de esas armas largas y todas legales.

El detenido, según revelaron fuentes de la investigación, estaba en posesión de la licencia de armas tipo D (armas largas rayadas para caza mayor) que le permitía tener en casa hasta cinco de estos fusiles, con capacidad de acertar a un blanco situado hasta 1.500 metros de distancia. Murillo, que había pasado todas las pruebas psicotécnicas y carecía de antecedentes penales, además, tenía licencia de armas cortas y de tiro deportivo.

Mandos del operativo explicaron que tenía permiso para tener 13 de las 16 armas largas y cortas que se descubrieron entre su domicilio de Terrassa y su vehículo. No obstante, alguna de las legales había sido manipulada.

No tenía licencia para las dos armas de guerra que se descubrieron en su domicilio porque su posesión está terminantemente prohibida en España para particulares. Se trata de un fusil de asalto Cetme de fabricación española y un subfusil ametrallador Skorpion vz. 61 de fabricación checa. El Cetme, sospechan los investigadores, era una pieza de coleccionistas inutilizada que Murillo había vuelto operativa. La segunda, probablemente fue comprada en el mercado negro de los países del Este.

Además, el detenido guardaba en el coche dos pistolas. Una de ella, legal. La otra, manipulada y sin número de serie, comprada también en el mercado negro. El aspirante a magnicida, igualmente, atesoraba abundantes cajas de munición, tanto para la armas legales como para las proscritas.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios