El hijo de un narcotraficante revoluciona el mundo de la moda

Jordan Barret, a sus 20 años, se ha convertido en todo un icono de la moda, además de haber sido portada de prestigiosas portadas como 'Models.com, lo que le ha llevado a sumar medio millón de seguidores en Instagram. También se han fijado en él prestigiosos fotógrafos como Mario Testino o Steven Klein, además de estrellas como Kate Moss o Paris Hilton, según recoge ABC.

Su aproximación al mundo de la moda fue a una edad temprana, a los 14 años, cuando a un agente le dio una tarjeta pero éste la ignoró, pero años después su madre le convenció para que le diese otra oportunidad y, a partir de ahí, llegó el triunfo.

Tras haber trabajado para firmas como Tom Ford, Tommy Hilfiger, Versace o Moschino, este año se ha convertido en imagen de las fragancias '1 Million' y '1 Million Privé', de Paco Rabanne. «1 Million es la fragancia favorita de mis hermanos mayores y cuando llegué a la adolescencia, mi madre también me la compró a mí. Me alucina ser la cara de ese perfume», confesó el australiano para ICON.

Pero no todo es tan fantástico como parece. El padre de este joven, Adrian Barret, es uno de los líderes de los sindicatos de la droga más potentes de Australia. El cártel centraba su negocio en la venta de cannabis. Pero en 2013, una operación policial desmanteló la red y se incautaron unos 422.000 euros, armas, un Ferrari, y una gran mercancía de drogas, entre las que se encontraban éxtasis, cocaína y anfetaminas. En aquella operación se arrestaron a 28 personas, entre ellas a sus padres que fueron condenados a ochos años de prisión por narcotráfico. Afortunadamente para Jordan, la policía no encontró nada que le inculpara.