El chef José Andrés demanda a Trump con ocho millones de dólares

José Andrés presentó ayer en la Corte Superior del Distrito de Columbia la demanda contra Donald Trump, marcando un paso más en la disputa entre los dos empresarios tras la ruptura del acuerdo. El chef español adoptó esta postura tras los comentarios xenófobos de Trump.

El documento sostiene que José Andrés y su equipo "han sufrido y seguirán sufriendo daños en una cantidad que debe ser determinada en juicio, pero que se estima que no debe ser inferior a los 8 millones de dólares". Esa suma incluye "los gastos incurridos en el desarrollo del restaurante" español que José Andrés iba a dirigir en un nuevo hotel que el precandidato presidencial republicano está construyendo en el centro de Washington, además de "todos los pagos hechos" a la compañía del magnate, "los beneficios perdidos, y los intereses".

Los abogados de José Andrés argumentan que los comentarios de Trump, en los que calificaba de "violadores" y criminales a los inmigrantes mexicanos, "tuvieron un efecto adverso directo" en la planificación del restaurante y que, por tanto, la culpa de la ruptura del acuerdo debe recaer sobre el magnate.

La demanda también apunta que "la percepción de que los comentarios del señor Trump eran antihispanos hicieron que fuera muy difícil reclutar a personal apropiado para un restaurante hispano, atraer el número requerido de patrocinadores de comida hispana para una empresa rentable, y recaudar capital para lo que era un restaurante español extraordinariamente arriesgado".

Por su parte, Trump alegó en su demanda contra José Andrés que la negativa del cocinero a gestionar el restaurante le había ocasionado "pérdidas y daños por valor de millones de dólares".

Estos controvertidos comentarios le han hecho perder otros contratos, entre ellos con las cadenas de televisión Univisión, ESPN y NBC, la cadena de grandes almacenes Macy's y el organizador de las carreras de autos de Nascar.

Pero, a pesar de todos estos comentarios contra los inmigrantes, Donald Trump todavía lidera las encuestas de intención de voto para la nominación del Partido Republicano de cara a las elecciones presidenciales de 2016.