La 'ola joven' salta a otras edades y duplica su incidencia en menores de 12 años y mayores de 30
Los rastreadores detectan un aumento de los contagios familiares que se frena en los 70 años
En solo tres semanas la quinta ola ha alcanzado su cima. Y pese a que todavía la tendencia es «al alza», ya es «más contenida», ... aunque sus efectos sobre el sistema sanitario, y los ingresos hospitalarios, aún tienen recorrido porque siempre llegan un par de semanas después. La consejera de Sanidad, Verónica Casado, repasó la situación epidemiológica de la región e indicó que las nuevas variantes, las menores restricciones, el aumento de la movilidad y el contacto social, el fin de curso y una campaña de vacunación aún sin lograr una protección de grupo que logre frenar al coronavirus explican esta nueva etapa.
Comenzó de forma «abrupta», explicó, y en solo tres semanas arrolló a los veinteañeros con una incidencia acumulada de 3.591 casos, según el dato a 14 días. Ahora hay un marcado cambio, el de la transmisión comunitaria y el de haberse extendido a otras edades. Casado explicó que «los rastreadores nos dicen que la mayoría de los contagios en grupos de edad más altos son de carácter familiar». Y es que ahora el coronavirus encuentra camino entre los menores de 12 años, donde en tan solo una semana este colectivo ha pasado de 223 casos por cien mil habitantes a 523,6 y por encima de los veinteañeros.
Así, los treintañeros, que suponían 694,5 positivos por dicha población hace una semana, ya llegan a los 1.163 casos acumulados. Entre los 40 y los 50, era de 303 la tasa de diagnóstico y actualmente ya alcanza los 515,5. El siguiente tramo de edad pasa de 265 a 390 y los sexagenarios, de 175 positivos por cien mil habitantes a 346, según datos de este martes. A partir de los 70 la incidencia se mantiene más estable. Los mayores incrementos tienen lugar en los grupos etarios con menor cobertura vacunal. Una comparativa a más largo plazo aún incrementa más las tasas hasta duplicarlas en general.
La consejera achacó esta evolución a la movilidad entre los jóvenes, que son «supercontagiadores» de grupos de mayor edad y de allegados, entre los que puede haber, reconoció, «un escape inmunitario, porque las vacunas protegen, pero no al 100%». La pandemia sigue y suma. Este martes 1.547 nuevos casos y dos fallecimientos más.
La tasa de incidencia a 14 días aún sube y ha anotado 895 casos por cien mil habitantes, quince más que la jornada anterior, según informa la Consejería de Sanidad de la Junta. Un nivel que ya traslada al pasado mes de febrero. Sin embargo la tasa a siete días habla de estabilidad y muestra un ligero descenso de nuevo, aunque ni siquiera llega a un punto, hasta los 425 casos.
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Evolución y cifras generales a la media española, que registra 599 y 323 positivos por dicha población en el repaso quinquenal y semanal, respectivamente. La comunidad se sitúa en la tercera posición en el primer registro y en la cuarta, en el segundo. No obstante, la situación es muy variable según provincias. Burgos, Aranda de Duero, Miranda de Ebro, Palencia, Soria y Zamora son los núcleos grandes con más problemas. En cuanto a los brotes, el 35% de esta ola son por contactos sociales, muy por encima del dato del 4% y 5% de las anteriores. Entonces, el 90% eran por relaciones familiares. Castilla y León anotó ayer 511 brotes con 2.692 casos vinculados.
La responsable sanitaria autonómica también destacó la influencia de las variantes. Las nuevas cepas, tanto la beta (sudafricana) como la delta (india) continúan ganando peso y desplazando a la alfa (británica), que ya solo representa el 44,7% de los nuevos contagios en Castilla y León. Hace solo una semana suponía el 65,8%.
Hospitales con 415 ingresos
La comunidad está «en riesgo muy alto», insistió la consejera y valoró que la extensión del coronavirus ya se muestra en los hospitales. Repasó así que hay ya 415 ingresados, 355 en planta y 60 en las unidades de críticos, cuando hace tres semanas eran 68 hospitalizados; hace dos, 97, y hace una ya 225. En concreto, las tasas son ya superiores a la media española, con 6,8 ingresados por cada cien mil habitantes, por encima de los 5,45, y en el caso de las UCI, 2,42, por encima también del 2,19 de la media nacional.
En cuanto al perfil de los ingresados, la consejera explicó que el 62% de los atendidos en planta es el de un varón con 56,9 años, edad que desciende a 49 en los servicios de Neumología.
No obstante, y pese al aumento de la ocupación hospitalaria por covid, la consejera de Sanidad explicó que, por el momento, no ha afectado a la programación de cirugías y los hospitales aún mantienen su actividad, «aunque algunos están muy comprometidos y especialmente lo está Atención Primaria». En este sentido, los trabajadores del complejo asistencial de León califican de «mentira» los datos de la Junta y aseguran que la UCI leonesa tiene 16 camas y han tenido que ocupar parte de la dotación de reanimación, cuidados intermedios y unidad coronaria obligando a suspender las intervenciones programadas, según informa Leonoticias.
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