El concurso se cierne sobre Panrico tras el 'no' de Santa Perpètua al plan de ajuste

Los trabajadores de Panrico de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona) rechazaron por amplia mayoría el plan de ajuste acordado por la dirección y los sindicatos, que suponía una disminución en el número de despidos desde los 1.040 iniciales sin contar autónomos, ya que de ese modo la propuesta era de 1.914 hasta 745 y reducir los salarios de los restantes una media del 18%.

Fuentes sindicales explicaron a Europa Press que de los 219 empleados que ejercieron su derecho a voto en el centro barcelonés, 217 se mostraron contrarios al acuerdo y solo dos votaron a favor. Según explicaron, sin contar los votos de la fábrica barcelonesa el conjunto de plantas de Panrico en España había votado a favor del acuerdo por 81 votos de diferencia. Ahora, el resultado de Santa Perpètua y el rechazo de la plantilla al plan de viabilidad presentado por la dirección de Panrico vuelve a avivar el fantasma del concurso de acreedores.

Con todo, los sindicatos sostuvieron que existen unos 400 trabajadores que, en principio, se abstuvieron, pero no descartan que en realidad hayan votado en pequeños centros de menos de diez trabajadores, por ejemplo y que sus papeletas «afloren» en los próximos días.

El secretario general de UGT de Cataluña, Josep Maria Àlvarez, reconoció ayer que el conflicto laboral en Panrico es complejo y abogó por retomar el diálogo, también a nivel intersindical, mientras que su homólogo en CC OO, Joan Carles Gallego, defendió la posición de los trabajadores de no aceptar «chantajes». Según Gallego, la planta catalana es la más castigada en el plan de viabilidad, tanto en despidos como en rebajas salariales: «Es la más competitiva del grupo y necesitan condiciones que garanticen esta competitividad».