El presunto 'violador del portal' salió del Zambrana poco antes de los hechos

El presunto 'violador del portal', detenido por la Policía Local el domingo por un intento de agresión sexual en la calle Portugal y acusado después de tres más cometidos desde febrero, salió en libertad a principios del 2008 después de cumplir una condena de cinco años por una agresión sexual cometida con sólo 17 años en Ávila.

El sospechoso salió del centro de menores Zambrana antes de cumplir la pena íntegra a pesar de que la opinión del equipo psicosocial del colegio era desfavorable al considerar los especialistas que existían altas probabilidades de que pudiera reincidir, según informaron ayer fuentes policiales y del propio centro de menores.

El ahora acusado de cuatro delitos de agresión sexual, en principio todos ellos en grado de tentativa, fue condenado a la citada pena por una violación consumada anterior cometida siguiendo el mismo patrón que en los últimos hechos, es decir, el autor siguió a la víctima de madrugada por una calle poco frecuentada, la abordó y empleó «gran violencia» para arrastrarla hasta un portal, habitualmente del domicilio de la propia chica, para después forzarla.

Así lo hizo cuando aún era menor y así volvió a repetirse -está por demostrarse la autoría- en los últimos cuatro casos registrados en las calles Juan Mambrilla (24 de febrero), Nebrija (19 de abril), Curtidores (24 de junio) y Portugal (29 de junio). La resistencia ofrecida por las víctimas impidió que consumara la agresión y pudo salir huyendo impunemente hasta que el domingo le sorprendieron aún dentro del portal de la última víctima los agentes municipales, quienes pudieron detenerle después de una persecución a pie.

Su aparente falta de antecedentes, dado que la legislación permite borrarlos cuando las penas son cometidas por menores, dificultó las labores de investigación de los agentes hasta que, a raíz de la detención, las víctimas fueron reconociéndole una tras otra como el autor de los ataques.

Las fuentes consultadas explicaron que el joven mantuvo un comportamiento «normal» durante su estancia en el centro de menores del paseo de Juan Carlos I e, incluso, se encontraba en régimen de semilibertad al final de su condena y salía y entraba con asiduidad para trabajar en el exterior. Los psicólogos del colegio, sin embargo, advirtieron del elevado riesgo de reincidencia al juez de Menores, que finalmente acordó dejarlo en libertad ante la petición, porque así lo permite la Ley, del propio centro Zambrana.

El ahora acusado de cuatro delitos, Oldemar S. P. W., de 22 años, ingresó el miércoles en la prisión provincial por orden del juez de instrucción a la espera de juicio ante la gravedad de los hechos y el reconocimiento de las víctimas. El joven de origen ecuatoriano mantuvo siempre durante su paso por el Zambrana una actitud «no especialmente violenta» y siempre se mostró como una persona «muy meticulosa y extremadamente ordenada».

Los agentes del Servicio de Atención a la Mujer (SAM) de la Policía Nacional investigan ahora la posible participación del sospechoso en otras agresiones sexuales sin resolver, y de similares características, registradas en la capital en los últimos meses.