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La talla de la Virgen, en la iglesia de San Lorenzo.
La Junta entrega hoy a la Hermandad de San Lorenzo la talla restaurada de la Virgen

La Junta entrega hoy a la Hermandad de San Lorenzo la talla restaurada de la Virgen

La imagen de la patrona regresará el sábado al Monasterio de San Joaquín y Santa Ana desde el Centro de Conservación de Simancas

andrea rubio

Viernes, 28 de agosto 2015, 12:51

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«Virgen de los aguadores dame de tu agua bendita, agua que colme mi sed y me colme de alegría». Con este poema popular se refería el párroco de la iglesia de San Lorenzo, Jesús Mateo Fernández, a la patrona de Valladolid, cuya talla se encuentra actualmente en el Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Simancas, dado de que a pesar de que no mostraba un deterioro externo importante, «tenía algunas grietas». Por ello, la parroquia determinó necesaria su rehabilitación.

Tras un largo proceso de restauración, de aproximadamente seis meses, la imagen volverá a Valladolid, concretamente al Monasterio de Santa Ana, el sábado por la mañana a las 11:00 horas, donde devotos y cofrades darán la bienvenida a la Virgen. El domingo, la talla será trasladada en procesión hasta la iglesia de San Lorenzo a las 19:00 horas. Durante el tiempo que la pieza ha estado ausente, ha sido sustituida por una réplica casi idéntica, hasta el punto que muchos de los fieles ni siquiera se han percatado del cambio, explica Mateo Fernández.

Historia de una pieza medieval

  • Se desconoce el año en el que la talla de la Virgen llegó a Valladolid, alrededor de los siglos XV y XVI, aunque sí se tiene constancia de su procedencia. Traída del municipio toledano de Consuegra, fue encontrada por un pastor, y colocada en la muralla que en aquel entonces bordeaba la ciudad, a la altura de la Puerta de los Aguadores, en la orilla del río. De ahí que la primera advocación de la actual patrona de Valladolid fuera la de la Virgen de los Aguadores.

  • Una vez que se derrumba la muralla, con María de Molina, se traslada la talla a la ermita dedicada al diácono San Lorenzo. En 1685 fue colocada en el altar de la iglesia, construida en el año 1485 por Pedro Niño, y restaurada y ampliada en 1613. Veinticuatro años después se convierte en la patrona de Valladolid, aunque no será hasta el año 1963 cuando sea nombrada alcaldesa de honor perpetua de la ciudad.

El párroco, junto con los cofrades, tomó la decisión de restaurar la talla, dado que acumulaba cierto desgaste debido a su antigüedad. Es una imagen del siglo XIV, con 800 años a sus espaldas. La Junta de Castilla y León, a través de su centro en Simancas, ha proporcionado a la parroquia este servicio de rehabilitación de forma gratuita, al tratarse de una pieza de vital trascendencia en el patrimonio artístico y cultural de Valladolid, gesto que Mateo Fernández ha descrito como «un detalle muy bonito».

La talla de la Virgen es de madera policromada, de estilo románico bizantino y es de pequeño tamaño (93 centímetros).

Volverá de Simancas perfecta y a tiempo para presidir los actos y cultos que se celebrarán en su honor durante las Fiestas de la Virgen de San Lorenzo, comenta Mateo Fernández.

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