Se elevan a once los municipios evacuados por el avance de las llamas

La situación provocada por el incendio en la Sierra de la Culebra de Zamora está lejos de mejorar, según se puede extraer de las últimas noticias sobre el avance del fuego, que ha obligado a declarar el Nivel 2 de gravedad, a desalojar once pueblos y así a cortar la carretera Nacional 631 a la altura de Litos.

En la nota enviada a los medios por la Junta de Castilla y León se afirma que las estimaciones apuntan a que el fuego ha devastado ya 10.800 hectáreas y todo ello en un escenario climatológico en el que se prevé un «comportamiento explosivo» del incendio, lo que entraña un elevado riesgo para la extinción y provoca elevadas velocidades de propagación, así como gran intensidad y longitud de llama.

Las condiciones meteorológicas son muy desfavorables y ayer viernes hubo vientos constantes procedentes del sur de 30 kilómetros por hora, con comportamientos erráticos y con rachas de hasta 70 kilómetros por hora. La probabilidad de tormenta seca es alta y hay escasa probabilidad de precipitaciones. Están previstas temperaturas elevadas con registros que superen los 35 grados centígrados. El análisis de la situación de la atmósfera a través de técnicas de radiosondeo predice un alto potencial convectivo, se afirma en la notificación oficial.

Por todo ello, se espera una noche complicada en una zona. La provincia de Zamora registra dos Niveles 2 actualmente. El primero, declarado este viernes en la Sierra de la Culebra y que ha obligado a evacuar los municipios de Cabañas de Aliste, Torre de Aliste, Pobladura de Aliste, Mahíde, Palazuelo de las Cuevas, San Pedro de las Herrerías, Boya y Villardeciervos. Y, el segundo, este de Ferreras de Abajo y de Arriba. (Cabañas, Torres y Pobladura de Aliste, Mahíde, Palazuelo de las Cuevas, San Pedro de las Herrerías, Boya, Villardeciervos, Ferreras de Abajo y de Arriba, y Villanueva del Valrojo) permanecen evacuados, con sus vecinos repartidos entre las vecinas Camarzana de Tera y Alcañices. En los centros habilitados para acoger a los que han tenido que dejar sus casa se encuentran unas 317 personas, mientras que una cantidad similar ha sido acogida por amigos y familiares fuera de las localidades afectadas.