Valladolid

El viejo cuartel de Vadillos se demolerá para construir 51 viviendas para jóvenes en 2028

El abandonado edificio, que tiene forma de 'L', está compuesto por dos bloques que suman 32 viviendas ocupadas en su día por familias de la Guardia Civil, quienes fueron desalojados en 2007. Tras la demolición, se levantará un único inmueble de seis plantas más bajocubierta y donde la mayoría de los hogares contará con dos dormitorios. También se reservarán otros con una y hasta tres habitaciones. «Aproximadamente habrá 38 viviendas con dos dormitorios, diez para una persona y el resto con tres habitaciones», concreta la directora general de Vivienda de la Junta. Es decir, que cuando culmine la actuación se habrá pasado de 32 viviendas a 51. «Se hizo un estudio para determinar si el inmueble debía ser objeto de rehabilitación, pero su conservación determinó que lo mejor era su derribo. Y así se va a hacer».

El nuevo edificio no ocupará toda la parcela sobre la que se levanta el cuartel, donde también se encuentra un solar vacío de 977 metros cuadrados ubicado detrás del inmueble y donde la vegetación ha crecido con el abandono del cuartel. Parte del terreno se cederá a Sanidad con el objetivo de ampliar el centro de salud Pilarica-Circular, que está contiguo al antiguo cuartel. El edificio contará también con una planta sótano para estacionamiento de vehículos de entre 37 y 43 plazas de garaje. De esta forma, seis viviendas estarán dispuestas en la planta baja, cuarenta entre la primera y la quinta y cinco en la bajocubierta. «Ahora mismo se está trabajando en el proyecto de construcción y luego, lógicamente, vendrá toda la ejecución».

Las viviendas resultantes estarán destinadas a los jóvenes, quienes tendrán prioridad para acceder, pero todavía no se ha concretado si estarán disponibles en régimen de alquiler o venta. «Trabajamos sobre todo el alquiler, pero antes de sacar una promoción analizamos el registro público de demandantes, que es dónde los interesados nos dicen qué se demanda. Si hay una mayor solicitud de alquiler, acudiremos a eso pero llegado el momento lo analizaremos. En ese momento decidiremos con qué régimen sale», explica la directora general.

El abandonado cuartel de la plaza de Vadillos dejó de estar ocupado por familias de la Guardia Civil en 2007, cuando se procedió al desalojo de quienes habitaban en el edificio, que se levanta sobre un suelo cedido al Gobierno en 1945. Tras esto, el edificio permaneció abierto durante una década a tenor de una oficina que estuvo operativa en la planta baja y donde apenas trabajaron diez agentes durante una década. En febrero de 2018, la Junta recuperó formalmente la propiedad del edificio, cuando cesó oficialmente el uso de este espacio por parte la Benemérita. Ya antes, los vecinos del barrio alertaban del abandono del cuartel. Son casi cuarenta años, desde 1989, desde cuando piden que se destine a un uso social o dotacional. Al final, lo elegido ha sido derribarlo para construir viviendas para jóvenes. Mientras, sobre la fachada del edificio todavía cuelga un cartel donde se lee «La casa cuartel para el barrio».

«Se da una solución definitiva y una doble respuesta. Parte del edificio se destinará a ampliar el centro de salud y la otra parte a la construcción de 51 viviendas. Se está haciendo un anuncio que va a satisfacer las necesidades de esta zona y las reivindicaciones de los vecinos y de la Asociación Bailarín Vicente Escudero», ha apuntado el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, quien ha acompañado a la directora general de vivienda.

El cuartel de Vadillos tiene una suerte de hermano con una historia similar cerca del puente Colgante, construido en 1949 y cuyas sesenta viviendas, también para la Guardia Civil, fueron abandonadas en 2015, cuando se tapiaron los accesos al edificio. A pesar de que este último dejó de estar ocupado hace menos tiempo, la solución llegó antes y sin necesidad de demoler. La transformación aquí se definió en 56 pisos disponibles, también para alquiler joven. En este último caso se llegó ya a un acuerdo cuando Javier León de la Riva era alcalde con el objetivo de resucitar el espacio, que dependía de la Junta desde 1984.

Según informa la Junta, la inversión prevista asciende a cerca de los ocho millones de euros de los que siete se destinarán para la construcción de viviendas y 700.000 a la demolición del actual inmueble. La redacción del proyecto coincidirá con el derribo -unos cuatro meses-, después se licitará la obra -dos meses y medio- y finalmente se ejecutará la obra con un plazo de 18 meses. El anuncio se suma a las 772 viviendas impulsadas por la Junta de carácter público. Están las 42 viviendas en régimen de venta con descuento del 20% para jóvenes menores de 36 años en Viana de Cega, Medina de Rioseco, Tudela de Duero, Valoria la Buena y Matapozuelos. También hay 82 viviendas de alquiler rehabilitadas en Villalón de Campos y junto al puente Colgante en la capital. En régimen de viviendas colaborativas de alquiler se ejecutan 402 viviendas: 114 en Parquesol, 59 en Los Viveros, 50 en calle Mieses y 152 en Parque Alameda. Aquí también se añaden 27 en Medina. También se están promoviendo en régimen de venta o alquiler cien en los cuarteles de Conde Ansúrez.