Valladolid presenciará un eclipse solar parcial en marzo

2025 se presenta como un año realmente activo a nivel astronómico, con eventos importantes como la alineación planetaria que ocurrio en febrero, que no se repetirá en 400 años, y un eclipse lunar que tendrá lugar el 14 de marzo.

En este mismo mes tendrá lugar otro eclipse, aunque en este caso será solar, que se podrá apreciar de manera parcial. Este fenómeno será visible desde el norte del Oceano Atlántico, parte del Ártico, el noroeste de África, la mayor parte de Europa, el extremo oriental de América y el noroeste tanto de Rusia como de Groenlandia.

El eclipse tendrá una magnitud que variará según la zona geográfica desde la que se observe. Esta magnitud tiene una horquilla de valores entre 0 y 1, siendo mayor cuanto más parte del sol quede cubierta por la luna. Valladolid será uno de los mejores puntos para apreciarlo, al igual que todo el noroeste peninsular. Esas zonas se alcanzará un 0,4 mientras que las Islas Canarias y el oeste peninsular se reduce a un 0,3. El valor más bajo se registra en el este de la península y en Baleares, donde cae hasta 0,2.

La fecha para señalar en el calendario será el 29 de marzo y la hora en la que se inicia el eclipse en Valladolid será las 10:48 de la mañana. Tendrá una duración total de una hora y 48 minutos, hasta las 12:36, pudiendo observarse el máximo del fenómeno a las 11:42.

Aquí van 5 recomendaciones esenciales para poder verlo de manera segura:

Observar el sol siempre entraña algún riesgo debido a la gran cantidad de radiación que emite en diversas longitudes de onda. Esta radiación puede dañar la vista, produciendo ceguera si la observación es prolongada. Como norma general, incluso en un día cualquera, el sol no debe observarse ni con aparatos, ni filtros ni a simple vista, independientemente de si está siendo eclipsado o no.

Tampoco debe observarse con aparatos como cámaras, telescopios o prismáticos que no cuenten con un tratamiento específico para ello ni dispongan de filtros homologados.

El sol puede observarse con unos filtros oculares, que no son otros que las gafas de eclipse habituales. Estas deben estar homologadas por la Unión Europea, con un índice de opacidad 5 o mayor, y se deben utilizar según las instrucciones. Tienen que estar en perfecto estado de conservación y es recomendable observar el eclipse sentado, sin andar. Tampoco deben retirarse antes de tiempo, haciéndolo sólo cuando se aparte la mirada del Sol.

Se desaconseja utilizar instrumentos ópticos salvo por parte de profesionales o expertos. Tampoco se deben utilizar filtros oculares que se enrosquen, puesto que alcanzan una gran temperatura y se pueden romper. Los filtros deben colocarse en el objetivo.

Si no se dispone de gafas de eclipse, se puede observar mediante proyección, utilizando dos cartulinas. A la primera se le realiza un agujero y se coloca de espaldas al sol, proyectando una sombra sobre la segunda. A través del agujero hecho en la primera, se podrá ver proyectado el sol en la segunda sin riesgo para la vista.

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