La Seguridad Social inicia la obra del San Juan de la Cruz de Valladolid 21 años después de su cierre
La construcción de la sede telemática en el solar del colegio, que costará más de cinco millones, arranca con tres años de retraso y un plazo de ejecución de 15 meses
El colegio San Juan de la Cruz, situado en la calle Cardenal Torquemada (La Rondilla), cerró sus puertas en el verano de 1999 para dar ... paso, en teoría, a algún tipo de servicio público para el barrio. Primero se barajó un centro de día (2001), luego un ambulatorio (2003) e, incluso, llegó a plantearse un supermercado (2005). Pero ningún proyecto cuajó, el veterano inmueble de ladrillo cayó en el olvido y fue ocupado por indigentes hasta que la Seguridad Social –propietaria del suelo– decidió finalmente derribarlo (2016) y anunció después el inicio de la construcción de una oficina de la Tesorería General (2017). Ayer por la tarde, 21 años después del cierre del centro escolar y cuatro después de su derribo, los operarios metieron las máquinas para comenzar por fin la construcción de la anunciada sede telemática de la Tesorería General de la Seguridad Social, un proyecto que ha duplicado casi su presupuesto inicial hasta superar los cinco millones de euros en estos tres años de retraso y que cuenta con un plazo de ejecución de quince meses.
El comienzo de las obras pone así fin a más de veinte años de culebrón para dar paso, si todo va bien, en torno al verano del año que viene (2021), a una oficina en la que los vecinos podrán realizar sus trámites de manera telemática tanto con la Seguridad Social como con otras administraciones como la municipal. Será una sede física, aunque para realizar trámites virtuales, en la que los usuarios podrán asistir a cursos de formación para utilizar sus ordenadores.
El Ayuntamiento prevé urbanizar en paralelo la plazoleta de entrada de la calle Cardenal Torquemada
El futuro inmueble contará con dos plantas con una superficie de 2.560 metros cuadrados, de los que 147 se reservarán para una sala polivalente de uso para colectivos y vecinos, con acceso desde la plazoleta que da a la calle Tirso de Molina. Este espacio exterior, además, cuenta con un proyecto municipal aprobado y presupuestado (150.000 euros) desde hace dos años para urbanizarlo e incorporar un jardín, juegos infantiles y un área de estancia con bancos y arbolado.
La demolición del antiguo colegio concluyó en agosto de 2016 y el solar permaneció vallado (y poblado de malas hierbas) hasta que la semana pasada se colocó la caseta de obra y se alisó el terreno. Los operarios y las máquinas tomaron ayer por fin el terreno para comenzar los trabajos de construcción del futuro Centro de asistencia electrónica, que así se llama, de la Seguridad Social.
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