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La renovación del laboratorio del Clínico demora tratamientos de reproducción asistidaEl laboratorio en el que trabajan los profesionales de la Unidad de Reproducción Asistida y Fecundación In Vitro del Hospital Clínico de Valladolid está inmerso ... en obras de renovación e incorporación de nuevo equipamiento que supondrán una actualización de las instalaciones pero que ha conllevado demoras en la citación para tratamientos.
La agenda empezó a verse afectada a principios de noviembre y está previsto que se reanude la prestación asistencial en breve, ya que se han programado citas a partir de la segunda semana de febrero, según apuntan fuentes de Sacyl. El paréntesis ha generado quejas entre las personas que estaban pendientes de recibir la cita tratamientos.
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Ana Santiago
La obra había coincidido con el final del año, según explica Julio Alberto Gobernado, jefe de la Unidad de Reproducción Asistida, un periodo en el que se programa habitualmente una disminución de actividad para revisar equipos y acometer una puesta a punto y limpieza en profundidad del equipamiento.
Pero los trabajos de remodelación se han extendido más de lo previsto en el calendario y eso ha prolongado la lista de espera en un momento de aumento de demanda al haberse ampliado la cartera de servicios, con la ampliación de las edad de las madres aspirantes de 40 a 42 años para acceder a estos tratamientos en la sanidad pública de Castilla y León.
1.512 órdenes de asistencia
En 2024 para tratamientos de reproducción asistida en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid frente a las 1.053 que atendió la unidad en 2023.
Las dos unidades de referencia regional en materia de reproducción asistida están en Valladolid. El Río Hortega, que amplió el laboratorio el año pasado, atiende al área de Valladolid Oeste y a parejas y mujeres de Ávila, Segovia, Salamanca y Zamora. El Clínico se ocupa de Valladolid Este y de Burgos, Palencia, Soria y León. Este centro es, además, el que atiende a toda Castilla y León cuando es necesario un diagnóstico genético preimplantacional. Esta es una prestación sanitaria que se aplica, por ejemplo, cuando alguno de los miembros de la pareja es portador de un trastorno genéticos que pueden heredar sus descendientes. La legislación sobre reproducción asistida articula medidas para que no se perpetúen esas enfermedades y el diagnóstico genético es una opción.
La demanda de tratamientos ha aumentado en el Clínico un 50% entre 2023 y 2024, al pasar en doce meses de 1.053 a 1.512. Y no es solamente una cuestión cuantitativa, de números. El incremento de casos también acarrea cualitativamente una mayor complejidad.
«A partir de los 40 años, para poder hacer tratamiento con los ovocitos propios de la mujer se requiere, además del propio proceso de fecundación in vitro, un análisis genético de los embriones, porque se sabe que más del 40% de los que generan a partir de esa edad tienen alteraciones genéticas que hacen que esa mujer no se quede embarazada o aborte si sí se queda», explica el doctor Gobernado.
Los tratamientos que se denominan de baja complejidad, las inseminaciones artificiales, se hacen cada vez menos porque están indicados para mujeres de menos de 38 años. El paulatino retraso de la maternidad ha aumentado la edad de las pacientes y se requieren tratamientos más complejos: la fecundación in vitro, con técnicas de diagnóstico genético previo a la implantación del óvulo fecundado.
La parada para la reforma del laboratorio ha situado la espera para acceder a un tratamiento en el Hospital Clínico entre los 11 y los 12 meses en el caso de una fecundación in vitro normal. En el caso de requerir un diagnóstico genético, la demora ronda el año y medio. «Se ha juntado el aumento de la demanda con la obra, que está motivada por ese aumento de demanda», apunta el jefe de la unidad, que incide en que trabajan en un campo en el que las mejoras técnicas van apareciendo de continuo. «Eso repercute en los resultados, en el número de pacientes que se quedan embarazadas. Hemos implementado nuevo material. El laboratorio de Reproducción Asistida no tiene que envidiar nada a cualquier otro de hospital público o privado en cuanto a dotación tecnológica», precisa el especialista en reproducción asistida del Clínico.
El laboratorio, que empezará a funcionar a pleno rendimiento en cuanto los técnicos del Servicio de Medicina Preventiva culminen los análisis que garantizan la idoneidad de las instalaciones y la seguridad microbiológica, contará ese nuevo equipamiento técnico. En algún caso equipos que se incorporan a otras ya en funcionamiento y en otros, tecnología nueva. Se ha reforzar la estructura para garantizar un reparto seguro de las cargas y que permita soportar el peso de los nuevos contenedores de nitrógeno líquido para conservación de embriones y muestras seminales.
En el listado del aparataje que se pondrá en servicio figuran un incubador de tecnología 'time-lapse', cabinas de flujo laminar de uno y de dos puestos, ecógrafo de punciones foliculares, láser de biopsia de blastocitos, microscopio invertido con microinyectores, una estufa-incubadora, bidones secos para almacenaje de muestras y un incubador de sobremesa, entre otros equipos, permitirá hacer frente a ese incremento de parejas o mujeres en solitario que buscan un embarazo.
En la labor diaria de una Unidad de Reproducción Asistida y Fecundación in Vitro interviene un equipo de profesionales de alta especialización. Son principalmente ginecólogos, que se encargan del diagnóstico clínico, las punciones para obtener óvulos y las transferencias de embriones, y embriólogos, que abordan tareas de diagnóstico, de la fecundación in vitro, del congelado y descongelado de gametos y embriones... A los profesionales de estas dos especialidades les apoya personal de Enfermería, en una labor en la que intervienen también servicios imprescindible en quirófano, como anestesistas, o personal del departamento de análisis.
La actualización del laboratorio de Reproducción Asistida y Fecundación in Vitro se ha llevado en el marco de la remodelación de la 4ª planta-oeste de la torre principal del Clínico, donde se ubican también los paritorios. Ha conllevado una climatización de las estancias, cambio de ventanales y reforma del baño y dormitorio de las guardias. El presupuesto ha ascendido a 731.000 euros, de los que 275.000 son fondos de la UE.
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