Valladolid

El puente de Hispanoamérica pierde un carril hasta septiembre

El cierre servirá primero para montar las estructuras desde donde los operarios procederán a la reparación de los cables de la infraestructura que están sujetos sobre los pilares de cemento, que rondan los cuarenta metros de altura. Según informan desde el Ayuntamiento, se sustituirán dos cordones en los tirantes seis y nueve de este lado del puente y también se procederá a una inspección completa de toda esa línea de tirantes. Además se realizará una inspección parcial en el lado contrario, donde se aprovechará a ver el estado de los cartuchos inferiores de los tirantes. Para realizar esta revisión, desde el Consistorio concretan que solo será necesaria una ocupación puntual de la cera y del carril bici que no afectará en el tráfico rodado, a diferencia de esta primera. Sobre el puente, el Ayuntamiento también a punta a que la pérdida de capacidad estructural es mínima e inferior al margen de seguridad, si bien se ha decidido acometer una revisión en profundidad de los diez tirantes situados en el lado de aguas arriba.

La intervención también incluye la colocación de dos estructuras auxiliares, como son un andamio colgado bajo el tablero, que recorrerá el puente en su lateral de aguas arriba, y otro en forma de torre que rodeará la vela –la torre donde están los cables– en ese mismo lado. Esta será la primera parte de la intervención, desde donde se pasará a la propia actuación de revisión y reparación. La última consistirá en el desmontaje de los andamios, que en conjunto extiende los trabajos hasta finales de septiembre, salvo que las inspecciones revelen la necesidad de intervenciones adicionales.

Los trabajos se iniciarán semanas después de que uno de los cables que sujetan la estructura se destensara. Ocurrió el pasado mes de mayo, cuando la estructura sufrió este leve incidente en su lateral derecho, en dirección Parquesol, el mismo donde se actuará ahora. Un hecho que obligó a los Bomberos a intervenir y cuando desde el Ayuntamiento indicaron que la estructura no corría ningún tipo de riesgo. No es la primera intervención que se hace sobre el puente de Hispanoamérica, que ya pasó por el quirófano por el mismo motivo en 2022, cuando se aseguraron sus velas por primera vez desde el año 1999. Es decir, desde su fundación.

En aquella intervención también se trabajó sobre el mismo lado que en la actual, donde se sellaron los huecos de separación entre las piezas laterales y central del gran pilar donde se anclan los tirantes de acero. La intervención que se realizará hasta septiembre se enmarca en el lote 3 del contrato de conservación de las vías públicas, dedicado a estructuras y que responde a la detección de fallos en algunos de los tendones que forman parte de los tirantes del puente. Para la intervención se contará con la colaboración de los proyectistas del puente y con la de la empresa especializada que instaló originalmente los tirantes.