El toro de San Blas se consolida en las fiestas de Viana de Cega

Hace ya ocho años que la localidad vallisoletana de Viana de Cega se ha convertido en punto de encuentro taurino al llegar el mes de febrero, gracias a la celebración de la Virgen de las Candelas, de Santa Águeda y de San Blas.

Gracias a la iniciativa de la Asociación Taurina 'El Polvorín' y al esfuerzo económico y administrativo del Ayuntamiento, los vianeses han sabido potenciar una fiesta de por sí significativa para los vecinos a la que se acercan cada año cientos de personas.

Aunque el momento principal llegó durante la tarde con el multitudinario encierro, el ambiente se fue animando sobre todo a la hora del vermut, en el que cientos de vecinos y visitantes se dejaban envolver por los ritmos de la charanga Cucúband, que fueron los encargados de amenizar la ruta del puchero por los bares de Viana.

Tras degustar pinchos, guisos y tapas y con las suaves temperaturas acompañando la jornada, el jolgorio se trasladaba durante la tarde al recorrido del encierro, donde las talanqueras de la zona de la plaza lucían a rebosar con la presencia de cientos de aficionados, vecinos, asistentes y curiosos que no quisieron perderse el momento álgido de este fin de semana festivo en Viana de Cega, el VIII Toro de San Blas.

Se desenjauló primero desde los cajones 'Avispado', un buen ejemplar de la ganadería Antonio Palla, que tras la salida desde el cajón y pese a responder en un primer momento a los cites de varios cortadores fue perdiendo fuelle hasta que fue conducido finalmente a toriles.

A diferencia de los tres bueyes que protagonizaron varios momentos de emoción al demostrar agilidad y bravura durante la suelta.

Posteriormente, llegó el momento del colorao de Hermanos Oro Vela, un bonito ejemplar de nombre 'León' que dio muestras de agilidad tanto en la salida como en las calles del encierro que recorrió varias veces atendiendo a las llamadas de decenas de cortadores entre los que destacaron en habilidad 'Cesitar' de Villaramiel, y el joven zamorano Dani Alonso.

Posteriormente, para prolongar la jornada taurina 'Avispado' ganó presencia en la plaza, respondiendo a los aficionados que le citaban. Fue arrancando aplausos entre el público, y puso así el broche de oro a una multitudinaria jornada taurina en la que afortunadamente no hubo que lamentar ningún incidente por cogidas o caídas graves.

Lejos de disiparse, el ambiente festivo continuó con la programación del fin de semana, en el que las actuaciones musicales en la carpa, situada en la Plaza Mayor, continuaron desde la tarde hasta bien entrada la madrugada para el disfrute de vecinos y visitantes que celebraron un año más estas fiestas en honor a las Candelas y San Blas. Para mañana, domingo, está prevista la misa y bendición de las Candelas. Luego le seguirá el tradicional refresco popular que se remonta a los orígenes de una fiesta cargada de significado para los vianeses.