Nava del Rey celebra una multitudinaria bajada de la Virgen de los Pegotes

Un año más la localidad de Nava del Rey celebró uno de los ritos de mayor arraigo de su historia. Hoy, la luz de las hogueras volvió a iluminar el camino de su imagen más querida, la Virgen de los Pegotes, que hasta el próximo 8 de diciembre permanecerá en los Santos Juanes para que los vecinos del municipio le rindan su especial y particular tributo. La subida y bajada de la Virgen de los Pegotes es un ritual que cada año cuenta con más adeptos, ya que se trata de una celebración única en la provincia de Valladolid que, el pasado año consiguió ser declarada como Fiesta de Interés Turístico Nacional debido a su singularidad, tradición y arraigo en la sociedad navarresa.

«Cada año la implicación es mayor e intentamos que la programación paralela tenga más calidad» explicó la alcaldesa de la localidad, Blanca Martín, quien destacó la elevada participación de esta edición, ya que «al caer en sábado la bajada, numerosos vecinos de los pueblos de alrededor deciden venir a Nava del Rey para compartir con nosotros esta celebración tan especial».

La fiesta, como viene siendo habitual, arrancó bien entrada la tarde en la Junta Agropecuaria Local, donde varias personas comenzaron a colocar a las mulas. Una vez finalizadas estas labores se procedió al encendido de los pegotes, y a las siete de la tarde se inició la procesión en la ermita de Nuestra Señora de la Concepción.

Al igual que en la primera procesión, donde según narra la historia, momentos antes del comienzo de la peregrinación se declaró una tormenta que obligó a retrasar la romería e iluminar artificialmente el trayecto con hogueras y pegotes, los navarreses y turistas se agolparon a última hora de la tarde de ayer por las diferentes calles del municipio, donde además de comer castañas miraron emocionados a su virgen.

De manera paralela, el Ayuntamiento ha decidido organizar una serie de actividades para completar esta festividad. Un total de siete establecimientos del municipio celebran las tradicionales jornadas gastronómicas que consistirán en la elaboración de tapas que tendrán que tener como ingredientes principales castañas y vino rancio.

Además de esta ruta de picoteo, la localidad acogerá la celebración del VIII Concurso de Espontáneos, en el que los establecimientos participantes tendrán que concurrir al mismo con cócteles o combinados elaborados con vino añejo. También se ha convocado el concurso para el diseño del cartel promocional de la Bajada y Subida de la Virgen de los Pegotes de 2020.

La programación se completará con talleres para los más pequeños de la casa, que incluso podrán recrear la típica procesión con figuras de plastilina, y hasta un concurso infantil de vivas o vítores recitados durante las procesiones, todo ello con el objetivo principal de que esta tradición no se pierda en el olvido y pase de generación en generación.

Al finalizar los nueve días de rezos, y al igual que en el año 1745, la Virgen de los Pegotes regresará el próximo 8 de diciembre a su ermita, donde la Hermandad Hijas de María Magdalena la engalanarán con mantos y joyas. Durante el transcurso de la procesión, denominada 'La Subida', en la calle Manuel Salvador Carmona el fuego se acompasará al rito de la campana conventual de las Terciarias Franciscanas, mientras los navarreses se agruparán en diferentes hogueras para contrarrestar el frío.

Ya en la salida del casco urbano, la comitiva se detendrá para que el párroco entone la salve. Una vez llegados a la ermita, tras pasar por la pedregosa cañada de Valdego, la imagen será colocada en el altar mayor de la ermita y los fieles entonarán el himno de la que es considerada la virgen más grande de Nava del Rey.