El Gobierno triplica la inversión para aliviar la rotonda de La Cistérniga, pero es «muy insuficiente»

Una cantidad «muy insuficiente», a juicio de la alcaldesa, Patricia González, pero que, evidencia el compromiso del Estado para resolver el conflicto y buscar una alternativa. «Siempre que haya más presupuesto destinado para mejorar cosas de nuestro municipio es una buena noticia. ¿Que es insuficiente? Sí, podría ser más, pero hay predisposición y voluntad de ir avanzando en esas mejoras», sostiene la regidora.

No cree, sin embargo, que ese «enjambre» para el tráfico, como lo califica, vaya a cambiar a corto o medio plazo. «Va a costar muchos millones hacer algo ahí», incide, al tiempo que considera que «los cien mil de la otra vez y lo de ahora será para licitaciones para desarrollar proyectos o concursos de ideas». «Es dinero, pero a efectos prácticos, de cuestiones de carreteras, no es nada; solo con traer un camión para quitar la tierra ya cuesta más», añade.

Por lo pronto, son ya 415.000 los euros que el Ejecutivo central invertirá en la conexión entre la VA-30 y la A-11. Para el subdelegado del Gobierno en la provincia, Emilio Álvarez, todo ello refleja el «interés» que se tiene desde Madrid en atender a la petición. «Para la obra como tal habría que invertir mucho más, pero demuestra que no lo deja en un cajón en el olvido y que va invirtiendo en la zona», argumenta.

El segundo eje inversor del Gobierno en la provincia de cara a 2022, más allá de la Alta Velocidad y los tramos de la A-11 entre Quintanilla y Olivares (54 millones) y entre Olivares y Tudela, es la pasarela de Boecillo, que salvará las carreteras N-601 y CL-600 y permitirá unir el casco urbano con varias urbanizaciones. El Estado ha presupuestado otros 768.000 euros –misma cantidad que para 2021– para que la deseada pasarela sea, por fin, dos años después de la autorización del convenio entre las partes implicadas –Gobierno, Junta y Ayuntamiento– una realidad. Una cantidad con la que, a priori, el Gobierno cumpliría con la porción que le corresponde aportar: el 40% de un proyecto que asciende a 2,1 millones de euros. El Ejecutivo autonómico financia otro 40% y el Consistorio, el 20% restante en torno a 420.000 euros.

Ahora mismo, el proyecto está en 'stand by' por «problemas con las autorizaciones de intervención del Ministerio» que llevaron a optar porque la parte del Estado sea finalmente sufragada con fondos europeos. «Faltaba el visto bueno de Hacienda, que como la partida se ha ido prolongando, aunque estaba presupuestada, no lo había autorizado, así que de esta forma parece que ya está solucionado y no va a haber los impedimentos que había antes», asevera Emilio Álvarez, quien confía en que se «agilicen» los trámites, se aprueben los Presupuestos Generales y se dé el impulso definitivo a la pasarela.

Por su parte, el alcalde del municipio, Raúl Gómez, considera que la partida es una «buena noticia porque no se dejan en el cajón del olvido», pero lamenta la demora del proyecto. «Estamos todavía en octubre y todavía no hemos firmado, por desgracia seguimos esperando a que se tramite el asunto», apostilla.

Tiene los plazos claros y solo espera que sus ojos vean «a corto plazo» el viaducto. «Desde la firma del convenio tenemos tres meses para contratación y supervisión, seis para licitación y dieciocho para ejecución. Estamos hablando de que si se autoriza ya, en dos años podríamos ver poner la última piedra», concluye.