Valladolid

Prisión para un profesor de la Escuela de Arte Dramático por «contacto físico y gratuito» a cuatro alumnas

Además de mostrar esa conducta en las aulas, donde impartía clases de anatomía para el movimiento, acrobacia o lucha escénica entre los años 2020 y 2023, el ahora condenado extrapoló ese «ánimo libidinoso» a encuentros en la calle. Una de esas situaciones sucedió, según recogen los hechos probados en la sentencia, el 29 de enero de 2022, cuando dos alumnas se encontraban de fiesta en una bar de la zona de la Catedral. Allí, el profesor entabló conversación con las dos jóvenes y se llegó a despedir hasta en tres ocasiones. Precisamente, en una de esas acciones, sin contar con el consentimiento de la alumna, le dio un beso en los labios.

El siguiente episodio tuvo lugar en el otoño del mismo año en una fiesta organizada por los alumnos de la Escuela de Arte Superior. En esta ocasión, el docente se acercó en reiteradas ocasiones a una misma alumna, invadiendo su espacio personal. «Guiado por un ánimo libidinoso sin contar con su consentimiento, le dio dos besos en las mejillas». Acto seguido, se fue al baño y a su vuelta, al pasar al lado de la misma joven, la agarró de la cintura y le dio otros dos besos. Los actos contra esta alumna continuaron a la salida del bar donde se celebraba la fiesta, pues J. R. M. B. la cortó el paso para agarrarla de la solapa de la chaqueta para atraerla hacia él, «lo que provocó un acercamiento excesivo de sus caras».

Esa misma noche y en la misma fiesta, el docente coincidió también con otras dos jóvenes. De nuevo, sin consentimiento, recorrió con su dedo el escote del vestido y la zona de los pechos de una alumna, hasta que le fue retirada la mano por la otra alumna que allí se encontraba.

Precisamente con esta otra joven, agrega la sentencia, tuvo otro encontronazo. Fue escasas semanas después de esa fiesta, en la plaza de Cantarranas. El condenado se acercó a su alumna y la manifestó «¿qué es eso que llevas?», a la par que tiraba de la falda. Fue reprendido por la joven, que le apartó y le dijo: «No me toques».

Ese historial de agresiones y abusos sexuales, reconocidos por J. R. M. B. se traslada también al curso académico, concretamente a un ejercicio de acrobacia en el que participaba la joven que padeció el episodio de Cantarranas. Mientras realizaba el pino, ayudada por dos compañeras, el profesor aprovechó para darla una cachetada en el culo, mientras la decía: «Ahí lo tienes».

Como consecuencia de todos estos hechos, una de las alumnas ha presentado ansiedad, insomnio e inseguridad, sin precisar de asistencia médica facultativa ni causarle un perjuicio personal.

Precisamente fueron los propios alumnos de la Escuela Superior de Arte Dramático los que denunciaron ante la dirección del centro la conducta del profesor. Finalmente, la entidad titular de la escuela, la Fundación Universidades y Enseñanzas Superiores de Castilla y León, puso en conocimiento de la Fiscalía los hechos para que continuara con la investigación.

Además del año de prisión, por el delito de agresión sexual, J. R. M. B. debe abonar una multa de 6.500 euros por los cuatro delitos de abusos sexuales. Asimismo, suma entre todos los delitos 11 años de inhabilitación para cualquier profesión que conlleve contacto regular y directo con menores de edad.

Finalmente, durante el acto de conformidad de este lunes, la pena de prisión impuesta fue suspendida durante dos años por el titular del juzgado al carecer el acusado de antecedentes penales. Todo ello supeditado a no cometer ningún nuevo delito y de comunicar los cambios de domicilio.