La APM mantiene la presidencia de la Audiencia de Valladolid tras la designación de Carranza
El Poder Judicial se decantó por el magistrado con 11 votos, frente a los 10 de Martín Verona
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) designó al magistrado palentino Francisco Javier Carranza Cantera (Baltanás, 1961), nuevo presidente de la Audiencia Provincial de Valladolid, ... puesto que se encontraba vacante tras la jubilación del juez Feliciano Trebolle.
La elección de Carranza, miembro de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), de tendencia conservadora, ha sido «muy reñida», según indicaron fuentes judiciales, con el candidato que fue respaldado por Juezas y Jueces para la Democracia (JD), Ignacio Martín Verona. El primero obtuvo 11 votos del Pleno, frente a los 10 del titular de Primera Instancia 12 de Valladolid.
A la convocatoria se presentaron un total de seis aspirantes, pero la comisión de selección dejó a cuatro para que el Pleno del Poder Judicial resolviera. Entre ellos figuraban también Ignacio Segoviano y Emilio Vega. El primero está destinado desde 2018 en la Audiencia de Palencia, mientras que el segundo es titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer 1 de la capital, y actual decano de los jueces.
Los vocales del Consejo también tuvieron que pronunciarse sobre las presidencias de las Audiencias Provinciales de A Coruña, Valencia y Castellón, además de la de Valladolid, por lo que ha entrado en juego en este proceso el reparto territorial de las principales asociaciones en estos órganos. Y Valladolid era una plaza clave ya que está bajo control de la APM desde el 2003.
Javier Carranza es licenciado en derecho por la Universidad de Valladolid, e ingresó en la carrera judicial en marzo de 1993 ocupando como primer destino el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Redondela (Pontevedra).
De allí pasó al Juzgado de Instrucción número 2 de Tuy (1992), regresando a Valladolid en febrero de 1995 para ocupar el Juzgado de Primera Instancia número 6 de la capital hasta el 2015. Actualmente está destinado en la sección 2 de la Audiencia de Burgos.
Ha sido juez decano de Valladolid cuatro años (2002-2006), y miembro de la Ejecutiva de la APM de Castilla y León y nacional varios años. El acceso a la presidencia vallisoletana será a partir del mes de septiembre, y ello obligará a convocar otras plazas en la Sección Penal al ser Carranza especialista en materia civil.
La designación pilló al magistrado palentino, vinculado a Valladolid desde los once años, de vacaciones en Alicante. Carranza se mostró contento y agradecido al asumir el cargo de presidente de la Audiencia Provincial de Valladolid, «mi ciudad, y espero estar a la altura de la responsabilidad recibida».
«Quiero agradecer al Consejo General del Poder Judicial la confianza que ha depositado en mi con este nombramiento. Sé que su decisión ha tenido que ser difícil dada la categoría del resto de los candidatos, que conozco bien porque todos ellos han sido mis compañeros durante los 18 años en los que fui titular del Juzgado de Primera Instancia 6 de Valladolid», señaló Carranza.
El juez palentino agradeció a la Asociación Profesional de la Magistratura, a su presidente nacional, Manuel Almenar, así como al presidente Territorial de Castilla y León, Luis Carlos Tejedor, «el apoyo y la solidaridad recibidos».
Finalmente recordó «la atención y el afecto recibidos» del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción, «desde el mismo momento en que le comuniqué mi intención de optar a la presidencia de la Audiencia Provincial de Valladolid».
Palabras para Trebolle
El nuevo presidente de la Audiencia recordó a su predecesor, Feliciano Trebolle, del que dijo «espero me servirá de guía para asumir el reto que se me presenta». La relación profesional entre ambos se acrecentó durante la etapa de Carranza como juez decano (2002-2006), en la que se reclamaron más órganos judiciales para Valladolid (de hecho se crearon el Primera Instancia número 15, Instrucción 6 y el de Violencia sobre la Mujer 1).
«Como vamos de tiempo»
La comisión del Consejo General del Poder Judicial que el pasado 16 de julio examinó a los seis aspirantes, de los cuales escogieron a cuatro para la fase final, fue categórica a la hora de recordar el tiempo que tenían en la exposición. Para ello, uno de los vocales no dudó en colocar un reloj, con la mejor visibilidad posible, para que no se excedieran.
Este magistrado, que ha llegado a utilizar el patinete para desplazarse desde la estación del Ave de Burgos, Rosa de Lima Manzano, hasta la sede de la Audiencia donde tiene su actual destino, y que en 2006 publicó su primer poemario 'Hora de la luz', jugó un papel decisivo en la movilización de los jueces de la APM en Castilla y León durante la convocatoria de huelga de octubre de 2009.
Se reclamaba al entonces Ministerio de Justicia, dirigido por el socialista Francisco Caamaño, «más personal y medios materiales» para equiparar la planta judicial española a la media europea(20 jueces por cada 100.000 habitantes). La movilización fue secundada por el 30% (19 magistrados de los 61 que estaban en activo ese año, incluido los del TSJ).
Entre sus sentencias, durante su etapa en Valladolid, está la declaración de paternidad de un hombre de 58 años, que en 2004 reclamó una herencia por importe de 6 millones de euros, tras descubrir que su padre era un rico ganadero de Laguna de Duero, que falleció sin descendencia y sin reconocer a su hijo. Los bienes los dejó al Ayuntamiento de Laguna y a la parroquia, y Carranza aceptó exhumar el cadáver para obtener una muestra de ADN.
«Mi trabajo es resolver los conflictos de la gente, intentar dar la razón a quien la tiene. Es algo tan pedestre, porque te hace bajar a lo más humano, a veces a lo más miserable. Pero eso también te ayuda, te da una perspectiva más realista y práctica», explicó hace años. Carranza se ha propuesto impulsar la mediación en civil y familia, apostar por el expediente digital y retomar el Campus de la Justicia.
Los candidatos descartados
Emilio Vega González. Juez de Violencia y decano
Especialista en Penal y violencia de género
Nacido en la localidad vallisoletana de Cervillego de la Cruz (1966), Emilio Vega se presentaba a la vacante como titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer 1 de Valladolid. Desde el 3 de diciembre de 2018 asumió como Juez Decano la representación de sus 38 compañeros en órganos unipersonales, una circunstancia que con toda probabilidad los consejeros del Poder Judicial han tenido en cuenta a efectos de descartarle. Forma parte de la Asociación Francisco de Vitoria.Vega ingresó en la carrera judicial en 1993, siendo destinado al Juzgado de Instrucción y Primera Instancia 1 de Villafranca de los Barros (Badajoz). De allí pasó por órganos de Benavente, Barcelona, Gijón, Zamora y Valladolid. En su trayectoria, el magistrado se hizo cargo de asuntos en materia penal sobre defraudación de empresas de Zamora por el IVA que no ingresaban. Otra de las intervenciones en las que participó se refiere al ejercicio de la patria potestad de un padre de Medina del Campo, que utilizaba esta situación para poner impedimentos a la madre y evitar así las visitas a los hijos, «con el objetivo de seguir maltratando a la madre».
Ignacio Segoviano. Magistrado de la Audiencia de Palencia
Creación de una comisión mixta de operadores
Magistrado especialista en asuntos civiles, a sus 58 años Ignacio Segoviano ha sido durante 12 juez decano de Valladolid, precisamente sucediendo a Javier Carranza en 2006. Licenciado en Derecho por la UVA (1985), ingresó en la carrera judicial en 1988, habiendo ocupado destinos en Villafranca del Penedés, Miranda de Ebro, Baracaldo y Vitoria, cuya administración de justicia está traspasada. Aunque la mayor parte de su carrera ha estado ligada a la jurisdicción civil, ha sido destinado temporalmente a órganos de lo Social. Es miembro de la APM, al igual que Carranza, pero los vocales del Consejo han optado por este último en su renovación al frente de la Audiencia Provincial. En su programa recogía la creación de una Comisión Mixta en Valladolid, que trataría de dar solución a los problemas que tiene la justicia en la provincia. La misma estaría formada por fiscales, jueces, letrados, abogados y procuradores. Una propuesta que chocó a un vocal del CGPJ. «No tendría facultad decisoria pero sería para gestionar muchos de los problemas comunes, y buscaría soluciones, sin que tenga fuerza ejecutiva, ni cuestionar al Poder Judicial», aclaró Segoviano.
Ignacio Martín Verona. Magistrado de Primera Instancia 12
Entre sentencias contrarias a bancos y los libros
Si algo resaltó este juez vallisoletano, cuando comenzó a ejercer la judicatura, es que la justicia, regida por códigos y artículos en algunos casos del siglo XIX, es que debe acomodarse a su tiempo actual. Fuera de los juzgados, Martín Verona (1966) ha desplegado una actividad también literaria, con la publicación de libros como 'Crónica de una conspiración carlista' (2005), 'La corte de los ingenios' (2012), 'La tabla de Himler» (2016) y, recientemente, 'Relatos del diablo'. En septiembre del año pasado, fue avalado por su asociación profesional, Juezas y Jueces para la Democracia, de la que es coordinador en Castilla y León, para ser uno de los integrantes a la renovación del Consejo General del Poder Judicial, proceso que se frustró luego por el comentario de Cosidó. Entre sus sentencias están las impuestas a iDental por los daños a pacientes, o el reconocimiento de la Segunda Oportunidad a ciudadanos embargados por los bancos. Precisamente por ello, uno de los vocales, el pasado 16 de julio, aprovechó la entrevista por videoconferencia para cuestionarle sobre el artículo que Verona publicó en la revista del Colegio de Abogados. En el mismo, el juez lamentaba que no tuvieran carácter retroactivo los efectos de las cláusulas suelo y la actuación del Tribunal Supremo.
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