

Secciones
Servicios
Destacamos
A uno se le encogía el corazón al escuchar y ver con el casco apuntando al cielo a Jimena. Durante el minuto de homenaje, amenizado por la dulzaina de Luis Ángel Fernández, no paró de llorar. Le temblaba el brazo de lo emocionada que estaba. ... Antes de todo eso se había dirigido a toda la concentración de Pingüinos para recordar a su tío Alberto, fallecido en marzo de 2024 en Marruecos en un accidente de tráfico.
Amante de las dos ruedas, Alberto se enfrascó en la primavera del año pasado en sacar su pasión motera fuera de la geografía española para ir con otros diez acompañantes, entre ellos su pareja, hasta el país vecino para conocer mundo. La fatalidad le llegó con un accidente y por ese motivo, el desfile de antorchas de este sábado, estuvo dedicado a él. Porque antes de que Jimena dejara sin habla a toda la Acera de Recoletos con su testimonio, el micrófono lo cogió Nina, la hermana de Alberto.
Visiblemente emocionada puso de manifiesto el dolor de los familiares y amigos. «Todos hemos perdido a alguien o conoces a alguien que lo ha sufrido», relataba desde lo alto del escenario. Recibían el mensaje, atentamente, centenares de moteros y otros tantos centenares de asistentes al desfile de antorchas. Mensajes en los que se colaban también los afectados por la dana en Valencia. Hubo un recuerdo para ellos plasmado también con varias camisetas impregnadas de barro, dos motos tiradas en el suelo y varias botas de agua manchadas.
Noticias relacionadas
Había tal cantidad de participantes en uno de los últimos actos de la concentración de este 2025 que era prácticamente imposible caminar por la Acera de Recoletos. Casi al nivel de la salida de la Marcha Contra el Cáncer. Porque este sábado, la céntrica vía fue no apta para aquellos que sufren con los elevados ruidos. El rugido de las motos se palpó durante toda la jornada, incluso antes de que llegara el aproximado medio millar de motos que con la noche iba a hacer acto de presencia desde la cúpula del Milenio. Se espera con mucha expectación el mar continuado de los aficionados a las dos ruedas. De hecho, desde una hora antes, los aledaños de la Academia de Caballería estaban ya colapsados por una multitudinaria muchedumbre. Querían coger un buen sitio como si de una procesión de Semana Santa se tratara, si bien, para muchos, este desfile es sagrado.
El corte de la calle Miguel Íscar llegó quince minutos antes del inicio de la actividad y dejaba a la gente sin poder cruzar de acera. Incluso, alguna vecina de la zona se lamentaba del rodeo que tenía que dar para llegar hasta su casa. «Pero si vivo ahí mismo, cómo voy a dar toda esta vuelta», imploraba una joven a un policía municipal.
Pues no le quedó más remedio que esquivar personas y personas hasta que logró llegar a la calle Santiago. Mientras tanto había gente que se subía la fuente de la plaza de Zorrilla y hasta la misma estatua de José Zorrilla para tener una panorámica preciosa de la llegada de las motos con sus bengalas.
Y la instantánea con Caballería de fondo era idílica. Las 'antorchas' trajeron al recorrido una nebulosa de niebla y obligaba a los presentes a utilizar las bufandas como mascarillas en una tarde de enero en la que no era necesaria la ropa de invierno.
Ese desfile de bengalas convirtió las calles de Valladolid en un Olympiacos-Panathinaikos de baloncesto. El infierno griego lo llaman cuando se enfrentan los dos equipos, si bien, aquí, no había nada por lo que preocuparse. Todos los presentes tiraban de móvil para inmortalizar momentos y los propios participantes hacían lo propio desde la moto. Este sábado, por eso de ser Pingüinos, la Policía Municipal no iba a multar por ir conduciendo con el teléfono en la mano.
Esas antorchas, un año más, iluminaron el cielo vallisoletano en recuerdo de las víctimas en accidente de tráfico como fue la de Alberto. Ese trágico desenlace no figura en las estadísticas nacionales al suceder fuera del territorio nacional. Aun así, en España, 300 personas murieron en vías interurbanas cuando iban encima de una moto en los últimos doce meses. Las mismas que el año anterior, según el balance presentado recientemente por el Gobierno.
Con esta actividad, Pingüinos 2025 prácticamente puso el punto final a una multitudinaria edición, marcada por las buenas temperaturas. Este domingo se entregarán los Pingüinos de Oro para poner el broche a cuatro días de concentración. «Prudencia y gas».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.