Valladolid

El IES Jiménez Lozano corre por Gambia

El objetivo era dar el mayor número de vueltas posible en doce minutos de carrera. Cada corredor se había encargado de buscar sus patrocinadores entre conocidos, familiares y amigos. El ambiente estuvo cargado de aplausos y gritos de ánimo hacia los participantes. En total, entre todos, completaron 1.121 vueltas. «Es una muy buena causa, por eso hoy tenía que venir a correr», dijo Javier Marcos, profesor de Biología en este instituto, que se calzó las deportivas para darlo todo en esta carrera. Sus ocho patrocinadores tendrán que darle un buen pellizco por las vueltas realizadas. «Me han patrocinado otros profesores y amigos y a la vez, yo he patrocinado a varios alumnos. Es un acto festivo en el que se ha implicado todo el centro. Participar en este tipo de actividades con el alumnado es algo precioso», añadió.

Inés, Hugo y Aitor estudiantes de 2º de ESO también salieron dispuestos a darlo todo en la pista. «Esperamos dar entre 15 y 20 vueltas. Eso supondrá un buen dinero porque hemos conseguido muchos patrocinadores. En mi caso, tengo 34», señalaba Hugo, reflejando el espíritu competitivo y solidario del evento. Entre los espectadores estaban Carla y Berta, alumnas de 4º de ESO. Ellas habían prometido 0,20 céntimos a su compañera Natalia, por cada vuelta que ésta realizara. «Nos parece una iniciativa estupenda, que fomenta el ejercicio físico y contribuye a una buena causa.

En la ONG 'Educando Mentes' han acogido con muchísima alegría esta iniciativa que les permitirá arreglar el tejado de una escuela en Gambia. Paz González, colaboradora de la ONG, explicó la importancia de esta ayuda: «estuvimos en aquel país en marzo y vimos que el estado de las instalaciones era lamentable y que en los meses de lluvias no podían dar clase. El presupuesto de las reparaciones asciende a 5.463 euros. Es increíble como todo el instituto se ha volcado con la causa. Todo lo que se recaude será muy bien recibido».

Miriam, un ejemplo de superación

Una de las grandes heroínas de la jornada fue Miriam Matas, una alumna de 3º de la ESO con necesidades educativas especiales y que habitualmente se desplaza en silla de ruedas motorizada. Con una gran esfuerzo pero con una sonrisa permanente en la cara, dejó su silla de ruedas y para coger su andador. Ayudada por Rocío Bravo, fisioterapeuta del instituto, dio dos vueltas completas al circuito. «Quería ayudar y me siento muy bien por haber podido hacerlo», comenta esta joven estudiante, cuyo caché por vuelta estaba muy alto. Tuvo que hacer mucho esfuerzo para conseguirlo, y a pesar de todo, el agotamiento no le borró su gran sonrisa. «Ella sola ha recaudado 209 euros, ya que mucha gente quiso darle su apoyo. Es una campeona. Llevábamos dos semanas entrenando con el andador. Tiene muchísimo mérito», añade la fisioterapeuta muy orgullosa.

Un grupo de alumnos hicieron las veces de jueces para controlar las vueltas que daba cada corredor. Sin duda fue una actividad muy especial para todos, que ha servido para lograr una ayuda crucial para Gambia y que a la vez ha promovido un fuerte espíritu de colaboración y responsabilidad social entre estudiantes y profesores.