Valladolid
CC OO exige más controles en la hostelería tras destaparse un caso de explotación laboralEl sindicato recuerda la detención de un empresario que imponía jornadas de diez horas diarias, salarios de 800 euros, sin contrato ni alta en la Seguridad Social ni vacaciones
Comisiones Obreras denunció este lunes el caso de explotación laboral destapado en un establecimiento hostelero de Valladolid durante este fin de semana, que culminó con la detención de un empresario, al constatarse que imponía jornadas de diez horas diarias, salarios de apenas 800 euros, ausencia de contrato, sin alta en la Seguridad Social ni vacaciones. «Una situación absolutamente inaceptable que vulnera los derechos laborales más básicos y la dignidad de las personas trabajadoras», comentó el sindicato, en un comunicado recogido por Ical.
Sin embargo, valoró la actuación de la Policía Nacional de Valladolid y de la Inspección de Trabajo, cuya investigación ha permitido destapar «un modelo de negocio basado en el abuso, la precariedad y la ilegalidad», pero exigió que las administraciones «no se limiten a intervenir solo cuando el daño ya está hecho».
«Este caso demuestra que la explotación laboral no es una excepción: es una consecuencia directa de un modelo económico que permite que algunos empresarios sigan enriqueciéndose a costa de la vulnerabilidad de otras personas. Si bien es cierto, no todos los empresarios del sector actúan de esta manera tan deleznable», denunció el responsable de Acción Sindical de la Federación de Servicios de CC OO Castilla y León, Javier Cuevas.
La central sindical insistió en la «necesidad» de reforzar las plantillas de la Inspección de Trabajo, especialmente en sectores como la hostelería, «donde proliferan los contratos irregulares, las jornadas abusivas y las condiciones indignas», puesto que los salarios percibidos por las personas trabajadoras en el sector «se encuentran en el umbral del SMI, con una media de 1.323 euros brutos, aproximadamente, en 12 pagas». CC OO consideró que con este tipo de salarios «no se incentiva el interés para trabajar en el sector de la hostelería».
«Justicia social»
Al respecto, recordó que la lucha contra la explotación laboral y la economía sumergida «es una cuestión de justicia social y de competencia leal». «Quienes cumplen con la ley no pueden verse perjudicados frente a quienes vulneran sistemáticamente los derechos de sus empleados y empleadas», trasladó.
Finalmente, la organización sindical reiteró su «compromiso» con los trabajadores, «independientemente de su origen o situación administrativa», y exigió que las víctimas de estas prácticas «tengan garantizada la protección, regularización y apoyo necesarios».