Urbanismo

Cinco barrios de Valladolid suman 1.816 viviendas en construcción simultánea

Las tres nuevas promociones en sumarse a la lista de proyectos se encuentran en los barrios de la Ciudad de la Comunicación (el más veterano de los cinco), junto al paseo del Arco de Ladrillo; Arcas Reales, al borde del polígono de Argales; y en la ampliación de El Peral, en el Camino Viejo de Simancas.

Este último plan parcial es ahora mismo el epicentro de la construcción en Valladolid con nueve promociones en marcha, y dos más recién terminadas, que superan con creces el medio millar de viviendas con precios, en la mayoría de los casos, prohibitivos.

A estos barrios hay que sumar otros dos que sufrieron los efectos de la crisis, como son el incipiente núcleo urbano de los Cuarteles de Farnesio, situado frente a la Ciudad de la Comunicación, al otro lado del paseo de Arco de Ladrillo; y Los Santos Pilarica, al final del paseo de Juan Carlos I.

En cuanto al barrio con más 'solera' de todos, como es la Ciudad de la Comunicación, allí la Junta de Gobierno municipal ha dado luz verde hoy a la construcción de un bloque de siete alturas con 39 viviendas, bautizado como residencial Nira, que ocupará un solar situado entre las calle Lille y Arco.

A tan solo unos metros, en la esquina de Lille con Guadalajara, se promociona ya otro edificio residencial (Ariza Valladolid 2), que ocupará un picón que acogerá otras 26 viviendas de uno a tres dormitorios con un precio medio que rondan los doscientos mil euros.

En la Ciudad de la Comunicación, además de estas dos promociones, hay otras dos en marcha: una de ellas (Alter) prácticamente rematada con vistas a la antigua estación de la Esperanza (vía de Ariza), con 90 viviendas, y otra (Torre Ariza), un antiguo torreón acristalado que se abandonó durante la crisis del ladrillo y que está ahora en plena fase de rehabilitación (sin su singular acristalamiento azul) para albergar 53 viviendas más al borde del paseo de Arco de Ladrillo.

En este barrio, en el que acaban de entregarse otras 63 viviendas más en una quinta promoción (Novo Ariza), están ahora mismo en construcción o en venta cuatro promociones que suman 205 viviendas (sin contar Novo Ariza).

La Ciudad de la Comunicación cuelga así prácticamente el cartel de completo 26 años después de su nacimiento, en 1999, a expensas de la ocupación de un amplio solar de uso comercial -allí llegó a planearse un centro comercial bautizado como Scena- y de otro aledaño destinado a la futura sede de Radio Televisión Española (RTVE).

El barrio tiene capacidad para 900 viviendas, Y en los bordes que miran a la línea de Ariza, una vía cuya desaparición está cada vez más próxima, en cuanto entre el funcionamiento la variante de mercancías, hay dos pequeños solares más adosados a dicho sector (Ariza), otro espacio aún por desarrollar que sumará medio millar de viviendas más en cuando dejen de circular los trenes de mercancías.

El órgano de Gobierno municipal, a su vez, ha dado también este martes la autorización para construir otro residencial, que se llamará Nalón, en otro barrio azotado por la crisis del ladrillo, como fue el de las Arcas Reales, junto al polígono de Argales, entre la carretera de Madrid, la avenida de Zamora y la prolongación de la calle Arca Real.

Allí el Grupo Parrado promueve la construcción de un residencial que se dividirá en dos bloques con 63 viviendas y que ocupará una manzana completa entre las calles Arca Real, Arca 4, Arca 5 y Viaje de las Aguas con la singularidad de que reservará un picón adosado (separado de los pisos), del lado de la calle Arca 4, en el que se levantará un edificio de uso comercial -aún sin inquilino, pero apto para un supermercado de tamaño medio o varias tiendas- con un aparcamiento en superficie con 16 plazas. El residencial Nalón, que contará con cinco alturas y zonas comunes, comenzará a comercializarse durante el mes de febrero.

El barrio de Arcas Reales, con capacidad para 1.176 viviendas, vive también un auge constructivo sin precedentes desde la aprobación de este sector en un lejano año 2004. Allí, además del ya anunciado residencial Nalón, hay otras cuatro promociones más en marcha, algunas en avanzada fase de construcción: Narcea (62 viviendas), Dama (46), Edificio Arca Real (53) y Navia (31).

Entre los cinco conjuntos residencial suman 255 viviendas para un barrio, un tanto encajonado entre el área industrial y la avenida de Zamora, que poco a poco va tomando vida y que el pasado verano estrenó su primera parada de autobús veinte años después de su nacimiento, que paralizó en seco la crisis del ladrillo.

El tercer residencial aprobado este martes por la Junta de Gobierno se encuentra en la ampliación de El Peral, un entorno con capacidad para 1.200 viviendas que comenzó a urbanizarse en un cercano 2021, después de años en barbecho, pero en el que prácticamente no quedan ya parcelas libres.

Allí hay ahora mismo ocho promociones en construcción o en venta, a las que acaba de sumarse una novena (ya en comercialización sobre plano), la aprobada hoy, que se denominará Las Terrazas del Pilar, un bloque de viviendas de protección pública de precio limitado (VPPL), en el que tendrán cabida dos bloques de cinco alturas de 34 y 16 viviendas, respectivamente (50 en total) y un edificio anexo de dos alturas con otras 14 casas unifamiliares adosadas (64 viviendas en total tendrá el conjunto).

Este residencial ocupará una parcela situada en el extremo oeste de la ampliación de El Peral, cerca ya del depósito municipal de vehículos, entre las calle Lima, Acerola, Pomelo y Membrillo, y sus precios de salida parten de los 186.000 euros.

En la ampliación de El Peral están ahora mismo en marcha nueve promociones con capacidad para 551 viviendas, a las que hay que sumar dos bloques ya terminados con otras 163 pisos más. Las nueve citadas se reparten entre pisos, adosados y viviendas unifamiliares (algunas de lujo con piscinas individuales y comunitaria por precios que parten de los 445.000 euros) en las siguientes promociones: Las Terrazas del Pilar (64), Pavalgán El Peral (39), Park Avenue (84), La Finca del Peral (39), Balansae (87), Residencial El Peral (91), Celere Nuevo Peral (46), Terrazas del Peral (69) y La Cañada del Peral (32).

Y otro recién llegado, aunque su proyecto coleaba desde finales del siglo pasado y principios del presente, es el incipiente barrio de los Cuarteles. Allí están en marcha media docena de promociones, dos de ellas en avanzado estado de construcción -sus inquilinos serán los primeros en estrenar el barrio levantado sobre los terrenos del antiguo cuartel General Monasterio)-, en los amplios terrenos urbanizados en 2022 situados entre los paseos de Farnesio y Arco de Ladrillo y la calles General Shelly y Nelson Mandela.

En sus parcelas se están levantando o a la venta 408 viviendas. Y al otro lado de General Shelly, del lado del antiguo cuartel Conde Ansúrez, están ya urbanizadas las calles y sus edificios esperan aún inquilinos, si bien allí solo se ocuparán para viviendas de protección los barracones centrales. En un picón, eso sí, está en rehabilitación el primero de sus inmuebles catalogados para albergar las nuevas instalaciones de la Escuela Superior de Diseño (ESI). En el barrio de los Cuarteles caben 839 viviendas.

Y el quinto barrio con más grúas en sus terrenos es el de Los Santos Pilarica, otro veterano nacido en los albores del siglo XXI al noreste de la capital, donde están en marcha siete promociones más con capacidad para 397 viviendas, incluida una que supera el centenar, la mayor de toda, denominada Heco Homes Almiar (111). Las otras seis son: Residencial Magna (23), Sapientia (69), Lando Co Andrómeda (52), Fase 5 Santos Pilarica (10), Aral Valladolid II (75) y Casiophea (57). Allí, eso sí, aún quedan amplias parcelas a la espera de inquilinos en el amplísimo plan parcial dibujado por el paseo de Juan Carlos I, el camino viejo de Renedo y la ronda norte.

De manera que, en resumen, cinco barrios en pleno auge de la capital acogen a día de hoy 25 promociones residenciales en marcha de manera simultánea con capacidad para 1.816 pisos y viviendas unifamiliares o adosadas, es decir, con capacidad para acoger a más de cinco mil almas. Y todo ello sobre terrenos que se vieron afectados por la explosión de la burbuja inmobiliaria vivida hace más de tres lustros y que paralizó barrios enteros que ya estaban en marcha, como los de Los Santos Pilarica, la Ciudad de la Comunicación o Arcas Reales, o retrasó la urbanización -léase el nacimiento- de otros, como fue el caso de los Cuarteles o de la ampliación de El Peral.

El auge inmobiliario, que recuerda sin duda al vivido antes de aquella crisis de los años 2007 y 2008, alcanza en paralelo a otros barrios de la capital como Parquesol, la avenida de Burgos (en la ampliación de Puente Jardín) o Villa de Prado, con decenas de promociones residenciales más en marcha con precios que también recuerdan a los de la burbuja inmobiliaria.