El Banco de Alimentos cierra su campaña de recogida de víveres con menos donaciones de las esperadas

La campaña de recogida de fondos desarrollada desde el pasado lunes por el Banco de Alimentos en colaboración con la asociación de supermercados de Castilla y León se cierra este sábado con menos donaciones de las previstas en un primer momento, según ha explicado el presidente de la entidad solidaria en Valladolid, Jesús Mediavilla, quien reconoce que los resultados han sido «más flojos de lo esperado».

Los cálculos del Banco de Alimentos aspiraban a conseguir durante esta semana unas donaciones cercanas a los 150.000 euros, para garantizar el suministro de víveres durante todo el verano para las despensas solidarias de Valladolid. «A falta de lo que se pueda recoger durante este sábado y del recuento definitivo, estamos en torno a los 100.000 o 120.000 euros», explicó Mediavilla.

El presidente del Banco de Alimentos atribuye este descenso «tal vez» a la falta de información sobre cómo colaborar. Antes de la pandemia, las campañas en los supermercados se celebraban como grandes operaciones kilo, donde los clientes hacían sus aportaciones en kilos de arroz o botes de garbanzos, por ejemplo. Desde el coronavirus, se ha optado por una modalidad que reduce el contacto: aportaciones económicas que el cliente hace al pagar en caja y que se consignan en su tique de compra.

El problema detectado por el Banco de Alimentos es que la falta de voluntarios en determinados supermercados (que antes recogían esa comida) hace que muchos clientes no sepan que se está desarrollando la campaña. Y, si no hay recordatorio en la línea de cajas, es difícil que se concrete en aportaciones. «Es algo que hemos detectado y que se va a solucionar para próximas convocatorias», apunta Mediavilla. Para ello, ya ha anunciado la creación de nuevos equipos de voluntarios para gestionar esta nueva modalidad de operaciones kilo, con una mayor presencia de colaboradores del Banco de Alimentos que informen a los clientes sobre cómo hacer sus aportaciones. «Esta vez hemos cubierto una parte importante de los supermercados, pero no hemos podido estar en todos para hacer el recordatorio», indica Mediavilla.

Las aportaciones económicas recibidas, aunque no alcancen la previsión, sí que traducirán, en todo caso, en cerca de 80.000 kilos de comida, «una cantidad por encima de la última campaña, celebrada en 2019, porque en 2020 no se pudo hacer la recogida de primavera». Esto garantizará el suministro durante los próximos meses. El Banco de Alimentos recuerda que aquellos que no hayan podido colaborar con la campaña celebrada esta semana, sí que podrán hacerlo con donaciones económicas a través de la página web.

El Banco de Alimentos ha aprovechado la pandemia para modificar en parte sus métodos de trabajo. Ahora, priorizan estas aportaciones en dinero, que luego ellos utilizan para adquirir aquellos productos que necesitan en cada momento. Esto evita que se haga acopio innecesario de víveres que tal vez no necesitan en un periodo concreto, al tiempo que permite controlar mejor la fecha de consumo preferente y facilitar las labores de logística, almacenamiento y reparto.