Borrar
Fachada del Parque Científico de la UVA.
El Parque Científico de la UVA abrirá sus servicios de investigación a empresas

El Parque Científico de la UVA abrirá sus servicios de investigación a empresas

El plan estratégico, aprobado en septiembre, marca la necesidad de propagar por el tejido empresarial qué puede aportar la universidad en proyectos de innovación y desarrollo

A. G. E.

Lunes, 6 de febrero 2017, 05:56

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Si alguna vez valió con esperar a que las empresas llamaran a la puerta, ya no es así. Si la investigación en algún momento fue algo accesorio a la labor docente, eso pasó a la historia.Considera Celedonio Álvarez, vicerrector de Desarrollo e Innovación Tecnológica, que el primer gran paso adelante fue Bolonia. Una nueva concepción de la educación universitaria. «Lo que hemos visto es que desde Bolonia tenemos una misión más extra, que ya la teníamos en realidad, que es la transferencia de conocimiento a la sociedad, y estamos más sensibilizados con esa parte», asegura.

O lo que es lo mismo.Que las investigaciones que se realizan en las entrañas universitarias puedan servir a la sociedad para mucho más que aumentar los índices de publicación de los docentes (que también se ha producido).

A ese nuevo espíritu del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES o Plan Bolonia) se ha sumado la crisis. «Las empresas se han dado cuenta de que las que han salvado los problemas han sido las que mantenían una apuesta por la innovación».

El Parque Científico de la Universidad de Valladolid comenzó a carburar en el año 2007 y cumple ahora 10 años. Es decir, que en esta década de vida ha comprobado de primera mano cómo se ha producido esa transformación. El primero en ocuparse del Parque Científico fue Daniel Miguel, hoy rector y entonces en el equipo de Evaristo Abril. Con él se encuentra Celedonio Álvarez, que ha asumido la dirección del Parque Científico y también de la Fundación General de la Universidad. No es una simple combinación de cargos en la placa del despacho.Se corresponde con un objetivo para el que se ha trazado un plan estratégico aprobado a finales del año pasado.

«Vamos a ponerlo en funcionamiento para mejorar nuestra filosofía y eso implica ser muchísimo más activos todavía», advierte Álvarez. Si el Consejo Social y la Universidad de Valladolid impulsaron la creación de un catálogo de servicios de investigación que se presentaron a las agrupaciones empresariales como la CVE, ahora se trata de vender esos servicios. Tomar una actitud comercial. «Debemos presentar desde un punto de vista comercial los servicios que ofrece la Universidad de Valladolid», señala el vicerrector. Porque eso permite que los grupos de investigación reconocidos (GIR), ahítos de ayudas públicas desde que arrancó la crisis, puedan permanecer activos. Un contrato con una empresa para desarrollar un determinado producto puede servir para financiar otro proyecto, o para contratar un ayudante. O también para acudir en pos de un proyecto europeo, que en muchas ocasiones reclaman como requisito imprescindible que el grupo de investigación acuda respaldado por una empresa.

«Debemos salir a bsucar en lugar de esperar. Ofrecer las posibilidades que confiere la UVA a las empresas. Darle visibilidad al potencial de la Universidad y que nos vean como un colaborador en I+D+i (Innovación, desarrollo e investigación).

Es el último gran peldaño que le queda a la UVA por superar en la consolidación de unParque Científico que ha cambiado mucho su fisonomía en su década de vida. «En estos diez años ha habido una evolución clara, respecto a dónde estaba la transferencia de conocimieto y dónde está ahora. Antes era algo más interno y el Parque apoyaba a los investigadores para ver si podían conseguir algún contrato con una empresa. Ahora tenemos un edificio especifico para empresas, el CTTA (Centro de Transferencia de Tecnologías Aplicadas).Ahora tenemos la fuerza para que las empresas que están detro del Parque tengan que colaborar con la UVA en I+D+i».

Porque el Parque Científico no es solo un edificio con laboratorios u oficinas. «En Laguna hay un vivero de empresas muy bueno», ejemplifica Celedonio Álvarez, «pero eso no es lo que ofrece el Parque Científico, sino la posibilidad de colaboración con la Universidad».

Empresas comoSolidGear, ubicada en el Parque Científico, o Naturae (CTTA) han crecido dentro de su conexión con la UVA. Otras, como Cognizant, se han establecido allí por el potencial de ubicarse en el entorno universitario, con las conexiones que eso permite. El mundo empresarial y el universitario convergen.Y eso es solo el comienzo, asegura Celedonio Álvarez. «Los investigadores y las empresas hablan dos idiomas distintos, porque tienen enfoques y objetivos muy diferentes. El Parque Científico se encarga de traducir las investigaciones de la UVAal idioma empresarial. Estamos en un momento en que las dos partes quieren relacionarse y tratamos de hacerlo lo más fácil posible».

Emprendedores

Otra faceta que se verá reforzada por la unión bajo un mismo puesto del Parque Científico y laFundación General será la de los emprendedores. Algo por lo que tanto la UVA como la Junta de Castilla y León ha decidido apostar. «También tenemos esa parte de dotar a los alumnos y profesores de los conocimientos empresariales que puede que no tengan, como los docentes que quieran poner en marcha una empresa de base tecnológica, lo que se llama una spin off».

En este plan estratégico se ha observado cómo funcionan otras universidades, qué modelos triunfan y cuáles de sus características podrían adaptarse al contexto de la UVA. Y la sorpresa es que la propia UVA sirve como modelo para otros.Así, Celedonio Álvarez ha acudido junto a representantes de laJunta a Colombia este fin de semana para explicar cómo funciona el plan T-CUE (Transfernencia de Conocimiento Universidad Empresa) a los rectores colombianos. «Hay modelos interesantes a nivel nacional e internacional, como Gante, la Universidad Libre de Amsterdam, la Carlos III... Pero nos están copiando a nosotros. En los últimos dos años nos han empezado a visitar universidades sudamericanas, asiáticas, africanas, para quee expliquemos cómo fomentamos el emprendimiento. Tanto ha sido así que vamos a crear una oficina de asesoramiento externo de transferencia y ya prestamos esa colaboración a ocho universidades sudafricanas, a la Universidad Pública de Viena y al sistema universitarios de Guinea Ecuatorial».

En España, Álvarez destaca el trabajo de las universidades gallegas, «la de Santiago es un ejemplo a seguir porque es generalista y similar a nosotros por tamaño. También la Complutense, la Autónoma y la Carlos III, de Madrid, la Politécnica de Valencia...».

A partir de ahora, al margen de otras iniciativas, el Parque Científico inicia su segunda etapa de crecimiento. La de vender a las empresas, locales o globales, de que la UVA tiene servicios de investigación que pueden beneficiarles en sus políticas de innovación y desarrollo.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios