Auvasa y sindicatos vuelven hoy a negociar para evitar el paro de mañana

El primer día de paro parcial de dos horas, entre las 13 y las 15, convocado por el Comité de Empresa de Auvasa para reclamar mejoras laborales, provocó este martes que las paradas de autobuses de la capital registrasen colas y que los vehículos fueran llenos en una hora considerada punta para trabajadores y estudiantes.

Las aglomeraciones se registraron a partir de la una, cuando de los 119 coches que debían de estar operativos en el turno de la mañana 60 se quedaron parados al secundar los conductores la huelga parcial.

El mayor número de viajeros que esperaban al mediodía lo hicieron en puntos del centro, como Plaza de España, Plaza Mayor, Plaza Zorrilla, o estación de autobuses. Los que se salieron beneficiados de esta falta de medio de transporte urbano fueron algunos taxistas.

Al contrario de lo que sucedió en la huelga de diciembre del 2012, los viajeros aguantaron y dijeron comprender los motivos del paro «en la confianza de que se logre un acuerdo cuanto antes».

Precisamente, la dirección y el comité se volverán a reunir esta tarde en el Ayuntamiento para tratar de buscar una solución que evite el paro de dos horas de mañana, jueves.

José Bustelo, presidente del Comité de Empresa de Auvasa, mantiene las demandas de los trabajadores de cara a la reunión de este miércoles. «Vamos a seguir con nuestras reivindicaciones y, según la propuesta que nos hagan, la consultaremos con los compañeros en una asamblea. No vamos a firmar nada. En todo caso un preacuerdo que podría aceptar el desconvocar, no la huelga, sino los paros del 17 y 22».

Bustelo reconoció que las direcciones de los sindicados CC OO y CSIF han tratado de mediar en el conflicto a instancia del Ayuntamiento, «pero nosotros somos los empleados y de nuestras pretensiones no nos van a bajar porque las consideramos justas», dijo

Manifestación

Sobre las diez de la mañana, grupos de trabajadores se concentraron en las cocheras del polígono de Argales, para salir en manifestación hasta la Plaza Mayor. A la cabeza de la marcha, que recorrió parte del paseo de Zorrilla, Puente Colgante, Plaza Colón y Duque de la Victoria, los empleados portaban una pancarta en la que se leía Por un calendario digno. Además se corearon consignas en las que se advertía a los usuarios de que Auvasa estaba en huelga por la modificación de los cuadrantes de trabajo para 2016.

«No queremos dinero sino unos calendarios de trabajo dignos, que no suponen un coste para el Ayuntamiento. Menos twitter, menos adornos y más acordar soluciones», se escuchó por la megafonía de la manifestación.

Fuentes del Comité de Empresa cuestionaron ayer que no se hubiera cumplido el derecho a la huelga, tal y como se fija en una sentencia, en la que se señala que «el conductor que se declare en paro, mientras esté en ruta, debería de regresar con el autobús hasta el centro de trabajo en las cocheras, y no puede bajarse del vehículo para ser sustituido por otro empleado que no secunde el paro parcial».

Los sindicatos aseguran que cada conductor tiene asignado un vehículo, y éste no puede recoger viajeros si el chófer comienza el paro. Fuentes del Comité de Huelga indicaron que se habría producido un incumplimiento cuando un autobús en huelga recogió en el Paseo de Filipinos a viajeros.

Sin embargo, este extremo no fue confirmado ayer por el concejal Luis Vélez, que consideró que el paro parcial «no registró ninguna incidencia respecto a los servicios mínimos acordados», y que eran del 30% de los autobuses que tenían que salir. Este porcentaje comprendía alrededor de 35 coches.

Fuentes del Comité indicaron que la propuesta que se ha hecho a la dirección incluye, además, la reducción de otros costes. «Tenemos un sistema que en ciertos momentos duplica a los trabajadores que van y entran en las cocheras, y eso la empresa no lo cuantífica. Hay conductores que entran por la mañana y no hacen ruta», indicaron.

El conflicto laboral en Auvasa, el primero al que se enfrenta la nueva Corporación salida de las elecciones de mayo, se produce después del encargo del estudio que ha hecho el Ayuntamiento de Valladolid para regular las líneas, paradas y tiempos de frecuencias. El informe técnico encargado a una consultora debería de haberse entregado el 30 de noviembre.

Además de los calendarios de trabajo, los conductores reclaman hacer menos domingos al año: de los 30 actuales piden que se pase a 23, lo que favorecería la conciliación familiar. Un chófer gana unos 1.700 euros netos al mes, incluidos domingos y festivos.

En este sentido, el concejal Vélez ha puesto en la mesa de negociación la contratación parcial de personal, para reducir el número de domingos al año, las horas extraordinarias y para favorecer la sustitución de los conductores que llevan haciendo el servicio nocturno Búho desde hace más de tres años, una de las peticiones sindicales.