Iluminar la Navidad en Valladolid cuesta 5.740 euros al día
El incremento del número de calles decoradas y negocios participantes refleja mayor optimismo para la campaña
J. Asua
Jueves, 26 de noviembre 2015, 12:39
Será el sábado, 28 de noviembre, cuando desde el balcón del Ayuntamiento se ilumine la Navidad. El tradicional encendido de los arcos y guirnaldas que decoran las calles llega este año antes que nunca y con una mejora en las expectativas para la campaña de consumo más importante del año. El incremento en el número de vías con ornamentadas de 58 a 67, así como la participación de 105 negocios más que el pasado año en esta iniciativa suben de 1.260 a 1.365 se puede interpretar como un síntoma de recuperación. Animar la trama urbana, convertirla en foco de celebración y encuentro, es para los negocios una de las acciones fundamentales para atraer clientes, para invitar a los vallisoletanos a recorrer las calles y, de paso, a comprar. Ayuntamiento y comercios destinan 229.600 euros a esta tradición con 23 años de historia en la capital, un presupuesto que se desglosa en los 222.000 que cuesta el montaje de las luces por parte de la empresa Ximénez y otros 7.600 de la factura eléctrica. Entre las cuarenta noches que se prolongará la llamativa decoración (se retira tras la festividad de los Reyes Magos), el coste asciende a 5.740 euros al día, de los que 180 corresponderían al recibo de luz. El gasto, coinciden Ayuntamiento y comerciantes, merece la pena. Lo destaca Javier Labarga, presidente de Fecosva, quien subraya que la iluminación es «un atractivo que no se puede perder». «Es una forma de atraer clientes, además el ciudadano lo agradece y estoy seguro de que si no se hiciera, los vallisoletanos lo reclamarían», argumenta el principal representante de esta entidad. Desde Avadeco añaden que el comercio realiza cada Navidad un especial esfuerzo «por mantener la ilusión y la tradición, transformando por completo los escaparates y aportando nuestro granito de arena a la financiación de la iluminación decorativa de calles y plazas, lo que genera actividad para dinamizar la vida de nuestras calles».
Dos horarios
Es el centro de la ciudad el que mayor número de calles encenderá, aunque cada vez más barrios se apuntan a esta tradición. La media de la inversión por comercio oscila entre los 50 y los 100 euros, dependiendo del número de establecimientos que se sumen en cada calle. En total, los operarios de la empresa Ximénez han colocado 355 arcos, 46 guirnaldas y 49 motivos diferentes. Básicamente, se repiten respecto a las pasadas Navidades. Un despliegue de 1,5 millones de puntos de luz de tecnología led que permiten disminuir el consumo de energía por encima del 50%. El horario de encendido será de 18:00 a 22:00 horas hasta el 17 de diciembre y, a partir del 18 de ese mes, se añadirá una hora más, hasta las 23:00.
En la nómina de calles que este año se han sumado a la decoración luminosa se encuentran Mateo Seone Sobral, Cardenal Torquemada, Padilla, Lira, Conde Ribadeo, Galatea, Comedias, San Felipe Neri, Guadamacileros, Paseo del Cauce, Renedo, Zúniga y el Atrio de Santiago. Por contra, se han apagado La Merced, Panaderos, Labradores y Profesor Adolfo Miaja de la Muela.
Las dos entidades que agrupan a los comercios de la capital confían en un repunte de ventas esta campaña. Avadeco aporta incluso un porcentaje concreto de incremento, que, sin ser espectacular, al menos sujeta el repunte que ya se apreció en 2014. «Esperamos en que por fin dejemos atrás la palabra crisis y los datos sean positivos, los comerciantes de Valladolid confían en un incremento del 5% en la facturación respecto al año pasado, también en contrataciones vemos datos positivos», señalan desde esta organización sectorial.
Según las estimaciones de esta entidad, el comercio minorista podría generar cerca de 350 puestos de trabajo como refuerzo en los establecimientos para atender la demanda prevista en la campaña , lo que supondría una mejora de en torno al 15% respecto a 2014. «Cerraremos el año con un crecimiento en las ventas de en torno al 3%, superior al tímido 0,9% de 2014 y esperamos en que en 2016 se produzca la reactivación definitiva del consumo», señalan en Avadeco.
Javier Labarga es partidario de «no lanzar las campanas al vuelo», pero reconoce que se aprecia «otro color» por lo que al consumo se refiere. «Hay más optimismo y confiamos en que tenga traslado en las cajas», apunta el presidente de Fecosva, partidario de que las zonas comerciales sigan realizando acciones conjuntas, como la que la zona del Calderón llevó a cabo en Seminci, y que actúan como imán para que los vallisoletanos apuesten por los negocios tradicionales.