Hallan ahorcado al hombre que acuchilló a su mujer en La Cistérniga

El hombre que golpeó salvajemente y acuchilló a su mujer mientras dormía a primera hora del pasado sábado en el domicilio familiar de La Cistérniga nunca se dio a la fuga sino que optó, según todos los indicios, por quitarse la vida esa misma mañana sin salir del inmueble en el que residía. Su cuerpo fue hallado a última hora de la tarde de ayer en el interior de un trastero del sótano al detectar los propios vecinos el mal olor procedente de la estancia, según confirmaron fuentes de la Guardia Civil, cuyos agentes continuaban al cierre de esta edición recabando pruebas en el lugar de los hechos.

El fallecido, Miguel Ángel S. J. M., de 38 años, perpetró la agresión a las siete de la mañana del sábado, cuando atacó a su compañera sentimental mientras dormía golpeándola en la cabeza con una escultura. La víctima logró desperezarse a tiempo de repeler un segundo ataque con un cuchillo. No pudo evitar, eso sí, que la produjera un corte en el cuello y una segunda herida en el brazo izquierdo. La mujer, pese a todo, logró escabullirse y salir al descansillo de su piso para pedir ayuda a los vecinos. Su novio, entre tanto, optó inicialmente por irse de la vivienda.

Los propios testigos que prestaron las primeras atenciones a la herida relataron cómo el agresor regresó a la casa unos minutos después. «Subió en el ascensor, se abrió la puerta y al ver a los vecinos que habíamos subido al escuchar los gritos dio media vuelta», relataron después los propios residentes. Miguel Ángel S. J. M. explicó antes que «él no había sido», elucubró sobre un «posible robo» y justificó que «bajaba a esperar a la ambulancia».

Su aparente huida -nunca volvió-, sin embargo, no debió ser tal. Los agentes que acudieron ayer de nuevo al garaje comunitario de la urbanización Eutiquio Velasco Cano, en la calle Laguna, encontraron al agresor ahorcado en un trastero del estacionamiento subterráneo. El avanzado estado de descomposición del cadáver lleva a los investigadores a pensar que nunca llegó a salir del bloque de viviendas.

La víctima sigue ingresada

Su compañera sentimental, con la que residía y mantenía una relación desde hace al menos tres años -vivían con un hijo de ella-, continúa ingresada en el Río Hortega y evoluciona favorablemente de las graves lesiones sufridas el sábado sin que su vida, salvo complicaciones, corra peligro. La Guardia Civil mantuvo su habitación vigilada estos días al carecer de pistas sobre el paradero del agresor aparentemente fugado. La mujer, que nunca llegó a perder la consciencia, relató después a los agentes que su novio la atacó sin previo aviso advirtiéndole de que «lo sentía, pero que la tenía que matar». Nunca había presentado denuncias por maltrato y su compañero, albañil de profesión, tampoco tenía antecedentes por este motivo. El cadáver del agresor fue traslado a las 22.15 al Instituto de Medicina Legal.