Una tradición que nace del corazón y del sentimiento

Cada 6 de enero llueva, nieve o haga sol, Almarza y San Andrés de Soria llevan a cabo una tradición con más de 700 años: trasladar el Arca de una localidad a otra como símbolo de hermandad y fraternidad.

Un Arca en la que descansan documentos del siglo XIV acerca de la Dehesa Boyal y su uso, firmados por Alfonso XI. Es nuestro día grande, por todo el valor sentimental que encierra. Son documentos muy valiosos, que fueron estudiados en el Archivo Histórico Provincial, inventariados, catalogados y microfilmados por investigadores y que tienen mucho que decir acerca de la gestión y explotación de las dehesas boyales.

Estamos realizando los trámites para que sea declarada Fiesta de Interés Regional, nos lo merecemos, no hay otra tradición igual.

Nuestra fiesta es sencilla, pero no exenta de solemnidad y de protocolo. Somos privilegiados al tener una tradición que nace del corazón y del sentimiento de los padres, abuelos y antepasados. La historia la hacemos cada día, nuestro pasado es un referente en valores culturales, en sentirnos partícipes del pueblo, nuestra seña de identidad, pero somos actores de nuestra propia historia, el presente y, sobre todo, el futuro.