

Secciones
Servicios
Destacamos
IDeal.Es
Viernes, 15 de septiembre 2017, 18:45
Muchos de los objetos que usamos diariamente en nuestra vida cotidiana fueron inventados con propósitos muy distintos de sus actuales funciones. Unos propósitos que no convencieron y que acabaron dando paso a nuevas utilidades, mucho más exitosas. A continuación algunos ejemplos.
1
Gafas de sol. En sus orígenes, allá por el siglo XII, este objeto que usamos para ver mejor en condiciones de mucha luz solar servía para tapar las expresiones faciales de los jueces, de forma que los presentes no pudieran captar ningún gesto.
2
Papel de aluminio. A principios del siglo XX, este utensilio que hoy en día no falta en ninguna cocina, servía para crear bandas reflectantes en las carreras de palomas. Fue en los años 40 cuando empezó a usarse para tapar la comida, consiguiendo un éxito mucho mayor.
3
Viagra. Este medicamento cuya función principal es conseguir erecciones masculinas, servía en sus orígenes para curar la hipertensión, la angina de pecho y otras enfermedades cardiovasculares
4
Cojines. En la actualidad, es un objeto de decoración que no falta en ningún hogar, además de un utensilio que nos permite estar más cómodos en casa. Sin embargo, su función inicial no era otra que evitar que los mocos bloquearan las vías respiratorias de los enfermos mientras estos dormían.
5
Listerine. Este enjuague bucal nació con otras pretensiones. Sus orígenes se remontan a finales del siglo XIX, cuando se utilizaba en procedimientos quirúrgicos y para curar la gonorrea. A lo largo de todo el siglo XX se llegó a utilizar para muchas otras cosas, como curar el resfriado o como aditivo para cigarrillos.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Favoritos de los suscriptores
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.