Semana Santa 2025
Las Siete Palabras escolta al Cristo de las Mercedes hasta la Catedral

Un recorrido en tinieblas con alfombra de romero, canto gregoriano y música sinfónica de Arroyo y Peñafiel encandilan a muchísimos fieles hasta la madrugada con el rezo del miserere

Luis Amo

Valladolid

Miércoles, 16 de abril 2025, 23:20

La espiritualidad procesional y la atracción del trazo urbano encandilaron una noche procesional con un prodigioso crucificado como postal de bienvenida: el Cristo de las ... Mercedes, que partía desde la Parroquia de Santiago, en un marco callejero único, con un abarrotado Atrio de Santiago alfombrado en romero y auspiciado por el apagado del alumbrado público. La Cofradía de las Siete Palabras volvió a conseguir otra noche seductora con su salida ceremoniosa, desde el interior del templo, por una planta procesional abierta por su santo y seña, la característica trompeta. El crucificado al fondo, en el crucero del templo, iluminado por velas y atisbado entre el incienso humeante con el que la hermandad también conseguía un ambiente pulcro.

La escolta procesional, cofrades y hermanas de devoción, avanzaban creando sombras en el entorno con el encendido de sus hachones al tiempo que configuraban un espacio de silencio y de murmullos en lo que parecía una máxima: silencio llama a silencio, amor llama a amor entorno al Cristo de las Mercedes, que salió con extraordinaria pericia del hombro de los mercedarios, los hermanos de las Siete Palabras que tienen el privilegio de hacer peregrinar y mecer a esta imagen de Pompeyo Leoni que volvería a casa de madrugada pero que volverá a salir el próximo Viernes Santo y sobre el que el pueblo vallisoletano meditará alrededor de las últimas Siete Palabras de Cristo en la Cruz.

La procesión de anoche es otra de esas páginas del libro de honor de la ciudad que en unos años ha conseguido acaparar la atención semanasantera de multitud de vallisoletanos y también de los visitantes que anoche se contaban ya por muchos. Todos acompañando al Cristo de las Mercedes hasta la Catedral y, este año, con una parada interparroquial en la plaza del Salvador, en un entorno donde el Ayuntamiento de Valladolid también permitió atenuar la luz de las farolas para conseguir más intimidad en el desfile que, en otro gesto de hermandad provincial, abría la Agrupación Musical Torre del Reloj de Peñafiel y cerraba la Banda Sinfónica de Arroyo. Entre medias, música gregoriana que hacían del centro una ciudad levítica.

Y en la entrada a la Seo Metropolitana, tras un emocionante avance a su interior, la interpretación del Himno del Santísimo Cristo de las Mercedes por parte del Coro Diocesano y cuya autoría es Diego Gutiérrez. Una pieza que cumple este año tres lustros adaptándose como novedad para banda sinfónica, para tocar en la calle, de la batuta y escritura musical de David Rivas, afamado compositor toresano. En la presidencia, el hermano mayor de la cofradía en este año, Francisco Javier Martín Cocho, junto a la consejera de Agricultura de la Junta de Castilla y León, María González Corral, y el concejal de Hacienda del Ayuntamiento, Francisco Blanco.