La residencia de Cáritas, ya libre de covid, pasa de acumular lista de espera a tener un tercio de las plazas vacantes
En el geriátrico de Sepúlveda ya han concluido las obras, aunque se plantea solicitar un nuevo ERTE para los trabajadores a la espera de los permisos para la reapertura
Uno de los problemas en general de las residencias «es que han fallecido muchos residentes y eso ha generado miedo a los ingresos. Las nuestras están vacías de covid desde hace muchos meses», explica el director de Cáritas, Mariano Illana. «Ni mucho menos estamos al cien por cien, tenemos un 30% de déficit de residentes, cuando ha habido listas de espera. Con el virus tenemos ese 30% de plazas libres», señala Illana, quien incide en que no se contabilizan contagios desde hace meses en esas residencias de Cáritas. En el caso de la residencia de Sepúlveda, ya están terminadas las obras, «se ha presentado toda la documentación para su apertura y estamos a la espera de los permisos de la Gerencia de Servicios Sociales», afirma el responsable de la organización diocesana
Mientras, se ha levantado el ERTE que afectaba a los trabajadores de la residencia «porque lógicamente no podían trabajar cuando la residencia estaba cerrada por obras. Y como sigue cerrada, siguen sin poder trabajar, aunque están dados de alta en la Seguridad Social. Nos hemos planteado volver a solicitar un ERTE a la espera de estos permisos, que esperamos lleguen lo antes posible. Cuando eso suceda, ahora mismo ya hay solicitudes, más de una veintena, para entrar en la residencia. Aunque no estuviera llena se abriría siempre y cuando tuviera un número suficiente».