«En quince años nunca había visto tantas bajas por estrés y fatiga»

«Llevo quince años en la empresa, antes con La Sepulvedana, y nunca había visto tantos compañeros de baja. Antes, a lo mejor estaba un 1% porque había caído enfermo, algo normal; pero hemos llegado a tener entre el 20% y el 22% de baja por el estrés, la fatiga, el cansancio y todas las horas que encima no se cobran», relata. «Ha habido gente se ha ido». Al mismo tiempo que agradece los apoyos y la comprensión que están recabando de muchos pasajeros habituales.

Las deficiencias en los autobuses son otro de los puntos de fricción con la concesionaria del transporte por carretera entre Segovia y Madrid. Hace un año, ya se denunció en Trabajo. En 2023, Avanza «tenía que haber cambiado los vehículos», como recoge la concesión. El delegado admite no haber podido acceder a documentación que acredite la modificación en la que se escuda la compañía, que después de la pandemia «es posible que se le ampliara» a la compañía ese plazo hasta el presente 2025.

En principio, cada cinco años la empresa tenía que renovar y sustituir autobuses, cuenta Segovia. Este punto «también lo han incumplido porque solo se han cambiado cinco de los quince vehículos», critica el representante de la plantilla.

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Los usuarios viajan en «asientos con los respaldos rotos», o asfixiados de calor o helados de frío porque la climatización no funciona. Los autocares en los que el sistema está bien se cuentan con los dedos de una mano, señala. «Raro es el mes que no haya una incidencia», revela Segovia, que tacha la gestión de Avanza en la seguridad y comodidad de la flota de «temeraria».