«Puta, zorra, que te acuestas con todos, qué haces con mi marido»

Los hechos se remontan a la tarde del 17 de julio de 2021. Entre las seis y media y las siete, la acusada se dirigió a la finca del hombre con el que hasta hacía dos años había mantenido una relación sentimental, situada en Otero de Herreros, a la que accedió por un portón que estaba abierto. Encontrándose también abierta la puerta de la casa, entró sin llamar, «sin el consentimiento de su titular y teniendo constancia de su voluntad contraria a raíz de incidentes anteriores», explica la sentencia. Una vez dentro, subió a la planta superior, al tiempo que gritaba: «Puta, zorra, que te acuestas con todos, qué haces con mi marido». La aludida, que se encontraba en ese momento en la casa, en la que residía desde hacía tres meses, le indicó que se fuera, a lo que la acusada se negó, alegando que aquella era su casa y el dueño su marido, momento que aprovechó para abalanzarse sobre la víctima, «agarrándola del pelo y dándole tirones, así como agarrándola con fuerza de las muñecas, ocasionándole un hematoma que no precisó tratamiento médico para su curación», relata la sentencia. La mujer consiguió zafarse y encerrarse en el cuarto de baño, momento que la agresora aprovechó para romper fotografías, marcos, objetos de decoración, macetas y plantas, cuyo valor no ha sido tasado, aunque no alcanza los 400 euros.

En el momento de los hechos, la ahora condenada presentaba síntomas compatibles con un trastorno adaptativo mixto e ideación de celos derivado de la ruptura sentimental. Aunque comprendía la ilicitud, su voluntad estaba parcialmente afectada. No hubo lugar a juicio.