Pacma solicita en los tribunales la suspensión cautelar de las becerradas de San Rafael

La portavoz de la organización denunciante, Laura Duarte, explica que la solicitud judicial radica en que el Ayuntamiento espinariego ha presentado «fuera de plazo» la pertinente solicitud ante la Junta de Castilla y León para la celebración de los tradicionales festejos taurinos, platos fuertes de las fiestas de San Rafael que están a la vuelta de la esquina.

Además, Duarte revela que Pacma ha detectado una segunda irregularidad en la tramitación del permiso, y es que el Consistorio de El Espinar «no ha adjuntado la documentación» correspondiente en el mismo momento de registrar la solicitud de autorización ante la Administración autonómica, que es la competente en la regulación de este tipo de espectáculos taurinos. En este caso, la portavoz de Pacma asegura que «no iba la documentación».

Por estas razones, los responsables del partido animalista consideran que las becerradas de San Rafael han de suspenderse y, por ende, han interpuesto este martes por la mañana la pertinente reclamación en los tribunales para que se tomen medidas cautelarísimas, reitera la portavoz de la organización. Así se lo han trasladado al alcalde espinariego las representantes de Pacma en la entrevista que han mantenido en la Casa Consistorial del municipio segoviano.

Según el partido defensor de los derechos de los animales, el máximo responsable municipal desconocía si se había incurrido en ambas irregularidades, ya que no ha llevado directamente la tramitación de las becerradas. Además de este movimiento de ficha judicial, Pacma prosigue con la campaña de firmas para reivindicar que se prohíban las becerradas en esta población. En este sentido, han trasladado al regidor alrededor de 52.000 apoyos recabados ya a favor de que desaparezca este festejo, según ha añadido Laura Duarte al salir de la reunión.

Esta iniciativa para sumar más respaldos va a seguir adelante hasta conseguir la prohibición, insiste la portavoz, que recuerda el caso del Toro Vega en Tordesillas y de la cruzada que llevó a cabo su plataforma para que se borrase del calendario festivo. Por otro lado, en la entrevista de este martes, Figueredo les ha transmitido que la celebración de las becerradas seguirá la norma establecida para que no haya ninguna duda de su legalidad, ya que hasta ahora no hay ninguna ley que las prohíba.

A pesar de las palabras el regidor de cumplir escrupulosamente con la regulación vigente y de subrayar que no se matará a los animales en los espectáculos, los representantes de Pacma cuestionan el procedimiento. La portavoz asegura que al final sí se da muerte a la res «fuera de la vista del público». Al animal «se le ponen banderillas, se le tortura y se le prolonga la agonía hasta que agotado se le conduce al matadero», precisa Laura Duarte, quien se reafirman en la «crueldad» de las becerradas de San Rafael.

La presidenta de Pacma, Silvia Barquero, y la propia portavoz de la organización han recibido algún que otro insulto y han sido increpadas por algunos vecinos cuando han salido de la reunión en el Ayuntamiento. La cita entre el partido animalista y el máximos responsable municipal, debido a la sensibilidad que genera la polémica suscitada alrededor de la tradición de las becerradas, ha contado con la vigilancia de la Guardia Civil para evitar que hubiera altercados.