Las quejas de los usuarios fuerzan a ampliar el programa de actividades en la piscina cubierta

Las protestas de los usuarios comenzaron a mediados de mayo, cuando Forus abrió el plazo de inscripción para el curso 2019-2020. Los cambios que proponía sucitaron de inmediato la reacción del público, porque algunos cursos desaparecían y la propuesta incluía la opción de agrupar a los nadadores por edades, en lugar de por niveles como hasta ahora, y con nuevos horarios adecuados a esta iniciativa.

Clara Luquero comentó que la oferta de actividades ha vuelto a ordenarse por niveles, en lugar de por grupos de edad, «como querían los usuarios» y añadió que la concejala de Deportes en funciones, marían Rueda, se había reunido al menos dos veces con los responsables de la empresa concesionaria para que ofertara una nueva propuesta «mucho más amplia».

No obstante, la alcaldesa matizó que «alguna modificación tiene que haber para que haya viabilidad económica», pues sería difícil conseguirla con actividades y cursos en los que participaran solo cuatro o cinco personas. Es la tesis que ya mencionó hace una semana, aunque en la propuesta que ya está publicada en la web del Instituto Municipal de Deportes hay ahora diecisiete actividades de natación, entre los cursos de matrona para distintas edades, los de niños y adolescentes, senior, adultos, terapia, embarazadas y club deportivo; en la oferta de escuelas deportivas incluye natación sincronizada, gimnasia rítmica, karate, judo y hip hop; la de actividades de agua con distintos horarios de lunes a sábado y las infantiles de lunes a viernes.

Si bien esta oferta que se puede consultar en la web o solicitar en la piscina ha de aprobarla el IMD, un grupo de usuarios ya expresó su disconformidad. Entre otras cosas, insisten en que hasta este año «existía el socio centro», un bono que permitía además de participar en el curso de natación y una actividad de sala, «poder acceder a la piscina de manera libre hasta las 16:00 o hasta el cierre, dependiendo del socio centro que se eligiese». Subrayan que «esta opción desaparece y de pagar entre 38 y 45 euros, se pasaría a pagar alrededor de 100 euros». Además, critican el cambio de horario y la reducción de horas de trabajo de los monitores con la propuesta de suprimir grupos; por lo que temen que vaya a implicar la supresión de puestos de trabajo.