Los juzgados de Segovia aceleran las resoluciones pese a crecer un 13% los asuntos ingresados
La jurisdicción de lo Social rebasa los mil casos pendientes al final del primer trimestre del año, un 15% más que doce meses atrás
Los juzgados de Segovia han vivido un primer trimestre del año frenético en comparación con el mismo periodo del año pasado, que se suma también ... a la actividad creciente durante la segunda mitad del 2020. Y todo ello dentro de un contexto restringido por las medidas de protección ante la covid-19, que inevitablemente ha condicionado el funcionamiento. Los meses de confinamiento y de paralización de la actividad a raíz de la declaración del primer estado de alarma se concentraron en el segundo tercio del ejercicio pandémico, de ahí que el curso vigente empezara con la carpeta de asuntos pendientes más abultada, a la que se ha añadido un incremento de los procesos ingresados del 13% durante los tres primeros meses de 2021.
Según reflejan los datos del Consejo General de Poder Judicial (CGPJ), la sobrecarga de trabajo provocada por las crisis sanitaria y económica desatadas del coronavirus ha hecho mella en la administración de la justicia y en sus ritmos, y se ha aliado con las tradicionales carencias de la judicatura en esta provincia.
En el conjunto de Segovia –que está dividida en los partidos judiciales de Cuéllar, Sepúlveda, Santa María la Real de Nieva y la propia capital–, entre los meses de enero y marzo se ha acelerado la capacidad resolutoria para aliviar el volumen de asuntos apilados durante los meses en los que administración judicial estuvo prácticamente paralizada sin la celebración de juicios. En el cómputo global de las jurisdicciones Civil, Penal Social y Administrativa, los órganos segovianos recibieron al año en curso con 6.699 expedientes en plena tramitación, casi un 9% que los que había al inicio de 2020.
El más castigado ha sido el Juzgado de lo Social, que al comienzo del presente ejercicio arrastraba 409 asuntos en trámite, un 51,4% más que en el primer trimestre del ejercicio 2020.
Un único órgano
Era de esperar que este órgano y esta jurisdicción fueran de los que más acusaran la sobrecarga generada durante los meses de azote de la covid. Hasta después de verano no se comenzó a trabajar con cierta intensidad por lo que durante todo 2020 los abogados recibían a cuentagotas la actividad de la oficina judicial, con las consiguientes demoras. Este juzgado ha pisado el acelerador de las resoluciones, pero le ha sido insuficiente para enjugar el volumen de casos que han ido llegando y sumándose a los que ya tenía. El ritmo de asuntos resueltos ha superado en un 9,5% al que tenía en el mismo trimestre del curso pasado, justo antes de que empezaran a sentirse los efectos de la pandemia.
Al final, el primer tercio del año en el único Juzgado de lo Social que posee la provincia se salda con 1.044 asuntos en trámite, que son 137 más que con los que empezó a deshojar el calendario del trimestre. Esto supone un aumento del 15% de procesos registrados e iniciados que se encuentran pendientes.
Aun así, multiplica la media de asuntos ingresados y resueltos con respecto al resto de competencias, con 403 y 267, respectivamente, por el único órgano dedicado a la jurisdicción de lo Social.
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