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Una de las fachadas de la ciudad de Segovia pendiente de saneamiento, en la calle Judería Vieja.
Las arcas locales ingresarán más de 600 euros al día en multas por infracciones urbanísticas

Las arcas locales ingresarán más de 600 euros al día en multas por infracciones urbanísticas

La creación de una unidad especial permitió tramitar en 2015 denuncias por 180.000 euros, un 280% más que en 2013

el norte

Lunes, 8 de febrero 2016, 11:03

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En los últimos meses se ha convertido en una imagen habitual la presencia de los bomberos en la plaza del Corpus de Segovia. Especialmente en días de lluvia, tienen que intervenir para asegurar la fachada del primer inmueble que uno se encuentra al acceder a la Judería Vieja a muy pocos metros de la Catedral y de la Plaza Mayor, que registra desprendimientos cada poco tiempo que ponen en riesgo la seguridad del viandante que se encuentra por la zona.Recientemente, el Ayuntamiento ha recibido por fin el proyecto de los propietarios de ese edificio para su rehabilitación. Esa consecución, que aún se tiene que materializar con la puesta en marcha de las obras después de que el propio Consistorio haya informado positivamente del proyecto presentado, ha sido posible en buena medida por la labor de la denominada Unidad de Disciplina Urbanística, que cumplirá en este 2016 tres años de existencia.

La Concejalía de Urbanismo comenzó a crearla en 2013 y la incorporó formalmente a su estructura en 2014. Es un departamento común en la mayoría de los consistorios de España, pero la capital segoviana estaba huérfano de él y no podía realizar la tarea de seguimiento, coerción y denuncia que lleva a cabo desde ese 2013. «Los que incumplían las normas urbanísticas estaban mucho más tranquilos porque el Ayuntamiento no llegaba hasta el final y rara era la vez que acababan recibiendo una multa», explica el concejal de Urbanismo, Alfonso Reguera.

La situación ha cambiado radicalmente, como lo demuestran la cuantía de las sanciones que este departamento municipal comenzó a imponer a raíz de la creación de la citada Unidad de Disciplina Urbanística. De los 47.391 euros en multas que tramitó en 2013 por infracciones urbanísticas en los dos años inmediatamente anteriores, 2011 y 2012, fue menos incluso, pues se situaron en 28.034 y 21.121, respectivamente se pasó a 388.801 euros en 2014 (año de la creación formal de la unidad) y a 180.000 en 2015.

Es cierto que en 2014 fue cuando se formalizó el expediente sancionador de los polémicos miniapartamentos construidos en el Valle del Eresma, que se llevaron el grueso de las multas impuestas por la Concejalía de Urbanismo ese año, pero en el 2015 el montante de las sanciones supuso un incremento de casi un 280% si se toma como referencia para la comparación 2013 o de un 750% si se atiende a 2012.

A esas cifras que el departamento que dirige Alfonso Reguera traslada después al Servicio de Recaudación del Ayuntamiento para su liquidación, habría que añadir las que también tramitó por irregularidades ambientales o incumplimientos en la ordenanza de terrazas, entre otros conceptos. Estas pasaron de constituir 34.020 euros en 2013 a situarse en torno a los 100.000 euros tanto en 2014 como en 2015, también a raíz de la creación de la Unidad de Disciplina Urbanística.

200 expedientes al año

Formada por dos personas, esta unidad gestiona alrededor de 200 expedientes al año. Aunque actúa contra infracciones urbanísticas, como puede ser la apertura de un establecimiento comercial sin licencia, uno de los principales objetivos por los que se puso en marcha fue corregir situaciones que enturbian la imagen de Segovia. Como ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, no se puede permitir,-según recuerda el concejal de Urbanismo, que haya edificios en pleno centro histórico en los que se produzcan desprendimientos en su fachada, como es el caso del citado en la plaza del Corpus.

Para acabar o al menos paliar hechos como ese, la Unidad de Disciplina Urbanística realiza un requerimiento a los propietarios de esos inmuebles que se encuentran en mal estado o que afean el aspecto de la ciudad para que procedan a su rehabilitación. En el caso de que estos no atiendan las demandas municipales, la unidad comienza a imponerles multas cuya cuantía crece progresivamente conforme al paso del tiempo si el denunciado no procede a actuar.En una situación parecida a la del edificio del Corpus se encuentra el del antiguo Hotel Victoria, en plena Plaza Mayor, o el conocido como edificio de los Buitrago, situado en el barrio de Santa Eulalia, a los que el Ayuntamiento, a través de esta oficina municipal, también ha exigido que lleven a cabo una serie de actuaciones «por cuestiones de seguridad y ornato», según recalcan el edil de Urbanismo y uno de sus técnicos.

La mejora estética que se busca se puede comprobar ya a muy pocos metros del Acueducto en un inmueble que rehabilitó una fachada que padecía innegablemente el paso del tiempo, pero no sólo se detiene en cuestiones arquitectónicas. También pretende acabar con prácticas que consideran que no están a la altura de la riqueza patrimonial de Segovia, como la cartelería anunciadora de empresas colgada en balcones también a escasa distancia del Acueducto. «El Plan Especial de las Áreas Históricas va a regular el ornato y nos va a permitir seguir dando pasos en este sentido», asevera Reguera, que insiste en que «la gente estaba acostumbrada a que el Ayuntamiento no actuara». La situación ha cambiado y el Consistorio está decidido a mantener la política que ha aplicado los dos últimos años. El concejal de Urbanismo revela que manejan la previsión de que en el presente 2016 se impondrán sanciones por un valor total de 250.000 euros debido a infracciones urbanísticas.

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