«Se ha banalizado el uso de los psicofármacos»
El director del Antonio Machado, Martín Vargas, calcula que el centro de salud mental de Segovia realiza seguimiento a más de 5.000 personas
César Blanco Elipe
Domingo, 11 de octubre 2015, 12:25
Aunque Segovia lució pañoleta naranja este viernes en conmemoración del Día Mundial de la Salud Mental, era este sábado la jornada oficial señalada en rojo en el calendario de las causas sanitarias y sociales. Los profesionales, como el director del centro Antonio Machado de Segovia, Martín Vargas, advierten de cómo la pirámide poblacional ha evolucionado hacia un envejecimiento que crece de manera geométrica, lo que condiciona los derroteros de la atención más adecuada a prestar y de la investigación.
Aumentan los problemas psiquiátricos en los mayores
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la evolución de la salud mental
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El director del centro de salud mental Antonio Machado, Martín Vargas, explica que, en los últimos años, «se ha evolucionado hacia el paradigma de la recuperación en la atención a personas con trastorno mental grave». El objetivo es «recuperar la capacidad de autonomía para ejercer los derechos ciudadanos, y para ello es necesario el control de los síntomas psiquiátricos, pero también retomar el funcionamiento que permita dar sentido a las experiencias vitales».
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En el trabajo diario del complejo, Vargas extrae otra conclusión el aumento de la demanda de atención infanto-juvenil en relación con conflictos interpersonales en adolescentes. Pero quizás lo más importante es «el incremento de los problemas psiquiátricos en las personas mayores, que se manifiestan con trastornos afectivos, cognitivos y del comportamiento». En respuesta, el centro trabaja en un programa de prevención precoz del trastorno mental; y, por otra parte, en un programa de neuropsiquiatría comunitaria, especialmente para mayores.
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Entre los proyectos del Antonio Machado, está el de proseguir con el curso pionero en España de formación en neurociencia y psicoanálisis, con el apoyo de Sacyl, en el que participan más de ochenta personas de Castilla y León.
El psiquiatra recuerda que «la crisis tuvo su efecto en salud mental hace dos o tres años, cuando veíamos a personas desesperanzadas; ahora lo notamos menos». La razón, no se sabe. Lo que sí se conoce es el ingente trabajo que desarrollan los profesionales del centro de salud mental situado en los Altos de la Piedad. Bastan algunas cifras para certificar que estamos ante una de las especialidades sociosanitarias reinantes en el siglo XXI.
De manera orientativa, Martín Vargas señala que «todos los días atendemos entre siete y diez episodios nuevos de personas con problemas de salud mental en el centro Antonio Machado». Su personal hace seguimiento a más de 5.000 pacientes. Al año, el complejo atiende entre 350 y 400 personas en la unidad de hospitalización. Asimismo, también se levar a cabo el control de un centenar de personas en rehabilitación psicosocial a través de otro centro propio.
Prudencia
Y otro dato más que aporta Vargas para hacerse una composición de lugar de esta labor: la media de diez urgencias psiquiátricas diarias a las que se presta asistencia en las diferentes unidades del servicio.
En cuanto a la evolución del tratamiento, el director concluye que «la medicación psiquiátrica es una ayuda muy importante para la recuperación de los trastornos mentales, pero hay que hacer un uso muy prudente». A su juicio, «se ha banalizado el uso de psicofármacos». Por otra parte, el especialista critica cómo «algunos psiquiatras han propiciado de manera irresponsable una visión reduccionista biológica de los problemas de salud mental condicionados por intereses económicos». Matiza que éstos son una minoría, «pero la medicalización de los problemas de la vida es un problema real que conviene evitar», apostilla Martín Vargas.
