Álvaro Antolín: «En Salamanca no suelto el móvil y cuando estoy en el pueblo no lo cojo»
El verano de Álvaro Antolín - Concejal del PSOE en elAyuntamiento ·
Ha aprovechado agosto para disfrutar de la tranquilidad de la vida rural en su pueblo, situado en el norte de la provincia de CáceresÁlvaro Antolín fue un destacado activista del movimiento estudiantil en la Universidad de Salamanca y ahora desarrolla sus inquietudes políticas desde las trincheras ideológicas del GrupoMunicipalSocialista en el Ayuntamiento. En esta entrevista, sin embargo, deja a un lado sus reivindicaciones políticas para revelar sus preferencias vacacionales.
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–¿Qué escapadas ha realizado durante estas semanas estivales?
–Tenemos una casita en el pueblo en el norte de Cáceres y he hecho alguna escapadita un par de fin de semanas, pero propiamente no se pueden considerar esas escapadas como vacaciones, porque es algo que hacemos en el verano y en el invierno. A medida de cómo vaya evolucionando la situación que estamos viviendo, planificaremos alguna escapada de dos o tres días.... Había estado pensando algo en el norte o en Portugal.
–¿Es capaz de desconectar de los plenos y de las comisiones del Ayuntamiento en vacaciones?
–La verdad es que no. Siempre leo las noticias y sigo la actualidad informativa de la ciudad aunque sean vacaciones.Además, siempre que te vas fuera te fijas en temas urbanísticos y de obras del lugar donde estés y lo tienes en la mente pensando para cuando vuelvas de vacaciones, para plantearlo en forma de iniciativa, extrapolando esa realidad a Salamanca y convirtiéndola, por ejemplo, en una posible moción... Cierto es que durante las vacaciones no estás tan encima de la política municipal y no tienes que leer y estudiar los diferentes expedientes de cara a preparar las comisiones municipales, pero la verdad es que no desconecto y sigo la actualidad local.
–¿Verano es sinónimo siempre de vacaciones o también dedica parte del tiempo al trabajo?
–Los dos años anteriores mi mayor carga de trabajo fue en verano y en el verano anterior a esos fue cuando finalicé la carrera de Ingeniería Industrial en Béjar. Realmente en los tres últimos veranos me he acostumbrado a tener un periodo de máxima actividad laboral y no disfrutar propiamente de vacaciones e ir apartándolas a otras épocas del año. El año pasado, por ejemplo, las disfruté a comienzos de septiembre y las hice coincidir con las Ferias. Y en el año anterior las cogí en marzo y me fui al extranjero. Por eso, me he acostumbrado en verano a hacer escapadas cortas más que a disfrutar diez días seguidos de vacaciones.
-¿Cómo le ha afectado la pandemia a sus planes vacacionales? ¿Es de ese tipo de personas que se lleva un disgusto enorme si no disfruta de vacaciones?
–No es mi caso. Y respecto a la pandemia, el pasado mes de abril tenía previsto hacer un viaje con mis padres a París y lo perdimos por culpa de la pandemia. A mi madre le hacía mucha ilusión conocer París y les regalé el viaje. Íbamos a viajar el puente de abril, tenía el viaje ya pagado y al final no pudo ser.Hemos recuperado el dinero del alojamiento, pero el del avión todavía no y estamos en ello. Al final resultó una mala experiencia y por eso prefiero no hacerme muchas ilusiones en estos momentos sobre planes y viajes.
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–¿Hace deporte en vacaciones'
–Me gusta mucho montar en bicicleta y es algo que procuro siempre hacer en el pueblo en vacaciones, ya que durante el resto del año apenas tengo tiempo. También me entretengo cuando estoy en el pueblo con pequeñas manualidades y bricolajes. El otro día, por ejemplo, estuve pintando la puerta de la cochera... Son cosas que no puedo hacer el resto del año por falta de tiempo. También me entretengo con el huerto, que lo hemos puesto este año. La verdad es que en vacaciones soy más de coger la caja de herramientas que de ponerme a leer un libro. Me gusta mucho el medio rural y, como me dice siempre mi madre y creo que tiene razón, cuando estoy en Salamanca no suelto el móvil y cuando estoy en el pueblo no lo cojo, ya que realmente no tenemos cobertura.
–¿Cuál ha sido su mejor verano y qué recuerdos guarda de él?
–Tengo guardado un verano que no se me olvidará nunca, que fue el verano cuando pasé del Bachillerato a la Universidad.El primer mes de ese verano fue espectacular organizando muchas excursiones con amigos y todo tipo de vivencias. Pero justo en la mitad del verano tuve la mala suerte de romperme el pie con un bordillo y me tuve que operar. El resto del verano fue aciago, me tuve que quedar en casa sin poder salir y de hecho empecé la Universidad con muletas. Fue un verano de enormes contrastes, porque me había sacado el carné de conducir y eso me daba mucha libertad para hacer excursiones con mis amigos y, sin embargo, tuve la mala suerte de romperme el pie.
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–¿Recomendaría Salamanca para pasar estas vacaciones por ser un destino turístico seguro?
–Por supuesto y este verano, dadas las actuales circunstancias, lo recomiendo todavía mucho más. No tenemos ese turismo masificado de las playas y ofrecemos al visitante otro tipo de encantos culturales y patrimoniales. Un magnífico plan de verano es una noche visitando Ieronimus oScala Coeli. Y ese tipo de encantos solo los tenemos en Salamanca.
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