Las de Lumbrales y Ciudad Rodrigo, entre las carreteras más peligrosas

La Dirección General de Tráfico actualiza cada tres meses la lista de los tramos de carreteras convencionales más peligrosos de cada provincia. Dichas carreteras concentran el 75% de los accidentes y la DGT quiere que los conductores "extremen las medidas de precaución y sobre todo cumplan los límites de velocidad establecidos en cada uno de ellos", según explica en una nota de prensa.

En el caso de Salamanca, la lista incluye 30 tramos, que suman un total de 715 kilómetros a lo largo y ancho de la provincia. Las carreteras más vigiladas serán la N-620, entre Salamanca y Ciudad Rodrigo (95,63 kilómetros, repartidos en tres tramos distintos), la CL-517, de Salamanca a Lumbrales (90 kilómetros en otros tres intervalos) y la SA-315, que discurre entre Vitigudino y la provincia de Zamora (dos tramos de 63 kilómetros). En el dossier hay vías nacionales, regionales y, sobre todo, provinciales. Entre éstas también destacan los 52 kilómetros de la SA-220, en el sur de Salamanca.

Los intervalos se deciden a través de un seguimiento pormenorizado de todos los accidentes graves en carreteras secundarias, en los que hubo víctimas mortales o heridos que necesitaron hospitalización. También se vigila la velocidad media de circulación y el número total de incidentes. Eso explica, según la DGT, que algunos tramos cambien de una lista a otra. La vigilancia específica de esas carreteras marcadas, además, se ha revelado como una herramienta eficaz para reducir la siniestralidad. De acuerdo a la Dirección General de Tráfico, en 2015 hubo 291 fallecidos en los trayectos más vigilados, mientras que en 2014, sin medidas especiales, hubo 337.

Además de identificar carreteras convencionales peligrosas, la administración también "intensifica la vigilancia de la velocidad a la que se circula con radares móviles. La web de la DGT recoge dónde se sitúan estos cinemómetros, muchos de los cuáles se ubican en tramos de vía también identificados como peligrosos. Son trayectos vigilados por partida doble. La DGT recuerda que los agentes de Tráfico también aplican el Plan Integral de Vigilancia: si el conductor circula a más velocidad de la permitida, los funcionarios le pararán, le identificarán y le realizarán pruebas de alcohol y drogas, además de comprobar la documentación, el permiso de conducir y el seguro obligatorio de circulación.

Esta primera revisión de tramos localiza 1.314 trayectos a nivel nacional (282 en Castilla y León), de los cuáles un 12,4% son nuevos respecto a los detectados en el último trimestre de 2015. En total suman más de 25.000 kilómetros de vías convencionales (6.355 en la región).