Sergio González 'resetea' al Real Valladolid: «Necesitamos una victoria como el comer»
El técnico admite que el equipo debe «ganar como sea» y considera que los próximos partidos ante Huesca y Alavés marcarán el rumbo de la temporada
Los tiempos del fútbol son cortos. Antes de iniciar la pasada jornada, Sergio González veía prematuro hablar de urgencias. Sin embargo, la dura derrota en Zorrilla ante el Eibar ha cambiado la percepción del entrenador del Real Valladolid. Ahora, ganar resulta perentorio para salir del pozo de la clasificación y sellar la primera victoria en seis partidos. Las dos últimas semanas, con el parón por medio, han servido para efectuar un análisis en profundidad de las causas del mal inicio.
Sergio González observa una plantilla «responsable», consciente de que no se puede permitir más tropiezos. «La realidad es la que es: hemos logrado solo dos puntos de quince. Vamos últimos. Así debemos afrontarlo. El si condicional no nos va ayudar, aunque pensemos que en algunos momentos el fútbol nos ha castigado mucho. Veo a la plantilla metida, con ganas de reivindicarse», analiza el entrenador.
Ahora sí, Sergio nota cómo las necesidades aprietan en un deporte donde el último partido siempre marca el termómetro. Los encuentros de este domingo ante el Huesca (El Alcoraz, 18:30 horas) y de la siguiente jornada en Zorrilla frente al Alavés (domingo 25, 12:00 horas) adquieren un carácter trascendente para el rumbo del equipo. «Es una evidencia. Puedo venir aquí, argumentar y decir que estamos bien... pero necesitamos una victoria como el comer. Al final lo que queremos es ganar, de la manera que sea. En este bloque de dos partidos la victoria debe estar con nosotros. No nos pasa otra cosa por la cabeza que ganar. Necesitamos quitarnos esa sensación de no lograr el triunfo, a pesar de que hayamos hecho cosas buenas. Queremos la victoria. Ya».
El ambiente en los Campos Anexos ha ido variando con el paso de los días. Las primeras sesiones tras el mazazo que supuso caer ante un Eibar con diez jugadores fueron algo parecido a un «luto futbolístico», con pocas bromas. Los entrenamientos posteriores fueron dejando paso a momentos más distendidos, «con alguna risa», pero siempre manteniendo «la intensidad» en el trabajo. «Los entrenamientos han sido muy buenos y eso me da confianza de cara a afrontar el partido de este domingo ante el Huesca», subraya Sergio.
El paupérrimo inicio ha llevado a la plantilla a varias sesiones de autoanálisis. El técnico quiere hacer una «limpieza» tras observar los errores cometidos en las cinco primeras jornadas y también en el Trofeo Ciudad de Valladolid ante el Athletic, que sirvió como laboratorio. «Debemos ser conscientes de lo que hemos hecho bien y lo que no. A partir de ahí, hemos reseteado y hemos tocado todas las teclas, desde la línea defensiva, donde nos faltan piezas. Hemos vuelto a trabajar el bloque defensivo y los cuatro o cinco aspectos que son nuestra esencia. A partir de ahí, queremos crecer con balón», explica el técnico blanquivioleta.
Las dos últimas semanas han funcionado como una especie de «minipretemporada» para atornillar conceptos. En cualquier caso, Sergio González no prevé «ningún cambio drástico» porque, aunque el equipo «no esté logrando resultados», sí ha encontrado «fases buenas de juego». «Mantendremos la idea, pero matizando los errores groseros que estamos cometiendo», anuncia.
Sergio González no solo se enfrenta al Huesca sino también a los problemas de su enfermería. La baja por lesión de Javi Sánchez obligará a cambiar de nuevo el eje de la defensa, con la aparición de la dupla Bruno-El Yamiq. «El asunto de los centrales nos preocupa. Siempre hemos entendido que deben formar una pareja estable y en este inicio parece que estamos flirteando. Vamos a tener que utilizar cuatro parejas de centrales en seis partidos. Resulta algo difícil de encajar para generar sinergias y sintonías. Pero es nuestra realidad y así debemos afrontarla», se resigna Sergio.
Fabián Orellana ha permanecido al margen durante las últimas sesiones y está previsto que este sábado trabaje con el grupo para entrar en la citación y viajar a Huesca. Jota se ha incorporado al trabajo con un golpe tras jugar con la selección sub 21 de Portugal y es un recién llegado. El imperial Joaquín Fernández ya se ha recuperado de su lesión, pero el técnico considera «prematuro» devolverle al once titular ya que acaba de iniciar el trabajo colectivo. En cambio, Rubén Alcaraz, también repuesto de su dolencia, ya está en condiciones de aparecer en la alineación para jugar «60 o 70 minutos». El encaje de Saidy Janko y Roque Mesa, dos de los últimos fichajes del equipo, es casi completo: «Están prácticamente al cien por cien. Se están entrenando fuerte y tienen buenas sensaciones. Su mejoría es palpable».
Sergio González no desvela si Roberto Jiménez se mantendrá en la portería o Jordi Masip retornará al once tras recuperarse de la covid-19. La idea del técnico pasa por no penalizar a aquellos jugadores que causan baja por lesión, una vez que vuelven a estar disponibles. «Lo veremos el domingo. Es un enigma que no quiero anticipar porque sería dar muchas pistas. Tenemos dos porteros de un nivel alto y podemos elegir entre los dos. Sí pienso, reflexiono y argumento esa idea: cuando uno pierde el sitio por lesión y se recupera, lo habitual es que retorne a su puesto y solo lo pierda si no está acertado».