El día más intenso de la historia en Segunda

Como es obvio, los dos grandes favoritos al ascenso son tanto el actual líder, la SD Eibar, y el segundo clasificado, la UD Almería, ambos con 80 puntos, mientras que el Real Valladolid con 78 está obligado a ganar al Huesca arropado por su afición en el José Zorrilla y esperar que al menos uno de sus rivales directos pinchen... lejos de sus estadios. Ambos ante equipos que ya no se juegan nada: el Alcorcón, rival de los vascos, ya está descendido desde hace varias jornadas pero el pasado fin de semana ya impidió que el Almería lograra el ascenso matemático empatando en los Juegos del Mediterráneo (1-1); y el Leganés, ahora 12º en la tabla y rival del Almería, podría aspirar a escalar dos posiciones en la tabla -y con ello lograr más dinero para el club- si pinchan el Burgos CF y la SD Huesca.

Lo más normal hasta ahora es que al menos una plaza o incluso las dos de ascenso llegaran ya decididas a la jornada final. Ya pasó el curso pasado con el Espanyol con 82 puntos y el Mallorca con 81 (el Almería era tercero con 70): ninguno ganó en la última jornada y conservaron sus puestos); también la 19-20, con el Cádiz con 69 y el Huesca con 67 (el Almería era tercero con 63), pero ahí sí bailaron los dos primeros puestos proclamándose campeón el Huesca con 70 tras su victoria y la derrota gaditana; en la 18-19, con Osasuna con 84, el Granada con 76 y el Málaga con 71; en la 17-18, con el Rayo en la penúltima jornada liderando con 76 puntos, el Huesca segundo con 75 y el Sporting tercero y ya sin opciones con 71 (al final se mantuvieron las dos primeras plazas inamovibles con derrotas de vallecanos y oscenses); en la 16-17 también estaba todo decidido con el Levante con 84, el Girona con 70 y el Getafe era tercero con 67 pero no podía superar en la última jornada a los catalanes por los enfrentamientos particulares.

Por tanto, para encontrar una plaza de ascenso en la última jornada hay que retrotraerse a la campaña 2015-16 con el Alavés con 74 puntos, el Leganés con 71 y el Nástic de Tarragona con 70. El Alavés empató con el propio Nástic (1-1) para salir campeón de Segunda y el Leganés certificó su segunda plaza y por tanto su ascenso directo venciendo al Mirandés (0-1).

En la campaña 2014-2015 sí que hubo cambio en una de las plazas de ascenso. Es el ejemplo al que se puede agarrar el Real Valladolid con este formato actual de dos ascensos directos. El Real Betis llegó líder a la última jornada con 84 puntos, seguido por el Girona con 81 y tercero era el Sporting de Gijón con 79. Pero los catalanes no pasaron del empate en casa con el Lugo (1-1, con gol de Caballero en el 92 para los lucenses) y el Sporting venció 0-2 al Betis para subir sin esperas, condenando al Girona a un 'play-off' en el que terminó subiendo Las Palmas.

Y en las cuatro primeras temporadas con este formato actual de la Segunda División no hubo cambios en la jornada definitiva por el ascenso. En la 13-14, el Eibar era primero con 70 puntos seguido por el Deportivo con 69 y el Barça B con 63 y salió campeón el Eibar con 71 porque el Dépor no fue capaz de ganar en Girona (3-1); en la 12-13 el Elche era primero con 79 puntos, seguido por el Villarreal y el Almería con 74; ambos se midieron en una jornada final fratricida y se impuso el Villarreal por 1-0 con un tanto de Jonathan Pereira. En la 11-12, el Dépor era ya campeón con 88 puntos, seguido por el Celta con 84 y el Real Valladolid con 82, pero los vigueses empataron 0-0 con el Córdoba y los pucelanos cayeron 1-3 con el Guadalajara dejándoles sin opciones de ascenso directo (a ambos les venía bien el empate, a los cordobeses para meterse en el 'play-off').

Es más, llevando la vista atrás hasta la campaña 1997-1998 en la que la Segunda División pasa a contar con 22 clubes –la anterior, la 96-97 fue la última con 20 clubes– solo hay una temporada en la que los tres primeros llegaban tan igualados a la jornada final. El CD Tenerife llegó a la jornada 42 con 81 puntos, los mismos que el Xerez y el tercero era el Real Zaragoza con 80. Pero con una diferencia clave de aquella temporada con la actual: los tres equipos ya estaban ascendidos –el cuarto, el Hércules, tenía 75 puntos– por lo que la jornada 42ª ya fue completamente intrascendente a efectos de ascenso pero no clasificatorios porque sí hubo baile de posiciones en la jornada final. El Xerez se proclamó campeón de la campaña 08-09 gracias a un empate en el campo del Celta (1-1), mientras que el Tenerife cayó del primer puesto al tercero tras perder con el Castellón (1-2) y el Real Zaragoza escaló a la segunda plaza con 81 puntos porque tampoco pudo ganar en el campo del Rayo Vallecano (2-2).

También estuvo tremendamente igualada la jornada final en la 2004-05 pero con tres puntos de diferencia entre los tres primeros y cuatro con respecto al cuarto, que llegó a la fecha número 42 con opciones de entrar al ascenso directo. El Alavés partió la jornada final primero con 76, segundo el Cádiz con 73, los mismos que el Celta, mientras que el cuarto era el Eibar con 72. Finalmente subieron los tres primeros pero cambio de posiciones: el Alavés perdió y pasó del primer al tercer puesto, se proclamó campeón de Segunda el Cádiz tras vencer 0-2 al Xerez y ascendió al segundo puesto el Celta ganando 0-2 al Lleida, terminando los tres empatados a 76 puntos y quedándose fuera el Eibar, que ni siquiera pudo ganar al Racing de Ferrol (1-1) para meter presión a los primeros.

Y de ahí hasta la temporada 97-98, primera con 22 equipos en la Segunda División -siempre con los tres primeros ascendiendo directamente a Primera- no ha habido cambios en la última jornada por el ascenso a la elite del fútbol nacional. La que rozó un cambio fue la 00-01 con el Sevilla líder con 77, el Betis segundo con 72, mientras que el CD Tenerife era tercero con 71, los mismos que el Atlético de Madrid. Sin embargo, en el último duelo del curso el Tenerife ganó en Leganés (0-1) hizo inútil el triunfo colchonero en Getafe (0-1), condenando a los atléticos a vivir una segunda campaña seguida en la categoría de plata (subieron en la 01-02).