La gran superación de Raúl Carnero: «Volver a jugar es una alegría tremenda»
El lateral izquierdo ha permanecido casi un año de baja por una gravísima lesión en la rodilla izquierda
«Estoy hasta nervioso de volver a la sala de prensa», declaró este miércoles Raúl García Carnero al ponerse delante de los micrófonos en el ... estadio Zorrilla. El lateral izquierdo había vivido unas horas antes su retorno a la competición como titular del Real Valladolid en la eliminatoria copera ante el Marchamalo. Atrás quedó un camino infernal marcado por una gravísima lesión en la rodilla izquierda que le ha obligado a pasar tres veces por el quirófano y que llegó a amenazar su continuidad como jugador profesional. «Después de once meses y un día volví a jugar. Es una alegría tremenda. Cuando tienes una lesión de esta gravedad, no sabes en qué fecha volverás... o incluso se puede dar la circunstancia de que no vuelvas y te tengas que retirar. He acortado mucho los plazos, con un trabajo muy duro y muy largo. Volví con buenas sensaciones, aunque aún me falta camino por recorrer para alcanzar el nivel en el que estaba. Es un gran paso para mí», añadió Carnero.
El lateral coruñés empezó a padecer problemas en el cartílago durante la pasada campaña y fue sometido a un tratamiento conservador que no tuvo éxito. Finalmente, tuvo que ser sometido a tres intervenciones quirúrgicas en la Clínica CEMTRO, pionera en terapia del cartílago a escala internacional, la primera de ellas el 19 de enero de 2021. «Sí, tuve que pasar tres veces por el quirófano. No se sabía cuándo iba a ser la vuelta: se hablaba de enero o febrero del año que viene, pero he logrado acortar los plazos. Todo esto ha sido posible gracias a mucha gente. Agradezco al equipo médico del club el trabajo que ha hecho; a la Clínica CEMTRO, con los doctores Isabel y Pedro Guillén, que me operaron; a Raúl Zarzuela, que trabajado conmigo todos los días y es al que más tengo que agradecer. No he tenido vacaciones: estuve en Coruña trabajando en una clínica con dos pedazo de profesionales, como son Adán y Antón. Mi vuelta ha sido posible gracias al trabajo de mucha gente, también de mi familia, que lo ha pasado muy mal».
Raúl Carnero sabía que la lesión que padecía podía retirarle del fútbol, pero prefirió no pensar mucho en esta amenaza. «Sabía que la posibilidad estaba ahí. Sin embargo, nunca me marqué plazos. Iba haciendo los trabajos que me marcaban. Si no, te acabas volviendo loco. Es demasiado tiempo acostumbrado a un ritmo de entrenamientos y partidos, a una vida de mucho trabajo. Estuve prácticamente tres meses sin poder apoyar la pierna. Estar tan parado afecta mucho. Siempre he intentado ir poco a poco y marcarme pequeños objetivos. Si no, me habría vuelto loco».
La Copa del Rey ha permitido a Carnero sumar sus primeros minutos de juego en casi un año. El partido ante el Marchamalo le ha dado «la oportunidad para coger confianza y la chispa de la competición». «Hemos pasado de fase y debemos seguir ilusionados con este torneo, que es muy bonito», consideró el futbolista gallego.
Carnero valoró el hecho de que el Real Valladolid haya pasado de ronda y explicó algunos de los condicionantes que se encontró el equipo blanquivioleta ante el Marchamalo, al que acabó ganando gracias a un protestado penalti sobre Toni Villa convertido por Roque Mesa. «Todos habríamos querido jugar un partido perfecto y ganar por muchos goles. La realidad es que nos encontramos un campo pequeño ante un rival que compitió bien y que hizo su partido. El césped estaba en mal estado. No fueron las mejores circunstancias, pero nos quedamos con el pase de ronda. Estos partidos son más complicados que ir a jugar el viernes a Huesca».
El lateral izquierdo sabe que pugnar ahora por la titularidad en Liga resulta muy complicado, ya que en su misma demarcación aparecen Nacho Martínez y Lucas Olaza, y su estado físico aún no es óptimo. «Veo lejos pelearlo. A día de hoy aún no estoy a mi mejor nivel. Me queda ganar mucha fuerza en la pierna y seguimos en un proceso de evolución. Tengo el alta médica y competitiva, he jugado, pero aún falta un poquito para que esté al cien por cien y con el derecho de exigir una titularidad. Eso me lo voy a ganar yo en los entrenamientos y en el campo. Se trata de ir dando pasitos y lograr pequeños objetivos personales. Si he jugado en Copa es porque el míster también me ha visto bien entrenando. Si no, no me habría puesto a jugar. Lo importante es aportar al equipo».
En ese plano colectivo, Raúl García Carnero observa «una evolución muy positiva desde el inicio de Liga hasta ahora». «Es algo normal cuando viene un cuerpo técnico nuevo, con jugadores nuevos y una pretemporada atípica por el covid. Estamos en un buen momento. Contamos con una gran plantilla y futbolistas de mucha calidad, y con una talla humana tremenda. El entrenador nos transmite mucho y nos motiva. Vamos por el buen camino. Veo al equipo muy bien, con una tremenda evolución ascendente. Además, creo que aún nos queda por crecer».
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