Alberto del Burgo, en el establecimiento San Remo, del vicepresidente de la asociación, Alberto Villegas. MANUEL BRÁGIMO

Renace con 110 socios en Palencia la asociación de hostelería no integrada en la CPOE

Alberto del Burgo, dueño del Hostal La Vasca, preside el colectivo, que da continuidad al que desapareció tras entrar en concurso de acreedores

ALMUDENA ÁLVAREZ

Palencia

Viernes, 14 de enero 2022, 07:27

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Representar y dar voz a los hosteleros de la capital y la provincia, defender sus intereses y ofrecerles todos los servicios que necesitan. Ese es ... el objetivo de la nueva asociación Hostelería de Palencia que da continuidad a la desaparecida Asociación de Empresarios de Hostelería y que preside el hostelero Alberto del Burgo. Hostelería de Palencia pretende ser la continuación de la antigua Asociación de Empresarios de Hostelería de Palencia, que había funcionado desde los años 70 pero no sobrevivió a una pandemia que la llevó a un presentar concurso de acreedores por falta de ingresos. «Ahora hemos querido retomarla, es la misma asociación, con los mismos socios y la misma gente», explica del Burgo, que, de momento, y aunque todo apunte a algo definitivo ejerce como presidente en funciones junto a Alberto Villegas, del Restaurante San Remo, como vicepresidente, y Andrés Enríquez de La Tapería como secretario, hasta que se elija a la nueva directiva. «Lo importante era empezar a funcionar», asegura este hostelero, propietario del Hostal Restaurante La Vasca en Quintana del Puente, que lleva 18 años en un negocio que aprendió de su padre, Antonio del Burgo, socio número siete de la antigua Asociación de Hostelería de Palencia. Asegura que a la idea romántica de continuar empujando algo que se inició en tiempos de su padre, hace cinco décadas, le puede la convicción de que el asociacionismo es fundamental en todos los sectores, pero sobre todo en uno tan golpeado por la pandemia de la Covid-19 como la hostelería. «Hemos sido los paganos de todas las medidas, los que hemos pagado el pato de todas las decisiones, restricciones y bandazos que ha dado la política sanitaria en los dos últimos años y que ha afectado enormemente a la hostelería y al turismo», asegura. «Todo ha recaído en nosotros y apenas hemos recibido ayudas o muy escasas», añade.

Por eso ahora, después de dos años «durísimos», con mucha confusión y mucho miedo, aperturas y cierres intermitentes, que han cerrado muchos negocios, y todavía con algunas limitaciones, han decidido impulsar la asociación, que sigue perteneciendo a las Federaciones de Hostelería de Castilla y León y de España, para devolver la ilusión y la energía al sector. «Lo primero que necesitamos son socios», explica del Burgo, porque Hostelería de Palencia nace con apenas 110 socios, la mitad de los 220 que había hace poco más de dos años, y que se fueron quedando por el camino, unos porque cerraron a causa de la pandemia y otros por desacuerdos, que siempre los hay, y más cuando las cosas van mal, explica Alberto del Burgo.

«Yo siempre he creído en las ventajas de estar asociado tanto a nivel de gestión como por la información que te facilitan desde la asociación», explica. Entre los retos que se marcan en este reinicio habla de fortalecer la asociación incrementando el número de socios, «para tener más capacidad económica y de acción» y recuerda que este es un momento importante porque se va a renovar el convenio de hostelería en la provincia y considera fundamental que haya una asociación llevando la voz de los hosteleros a las negociaciones.

También tratarán de recabar el apoyo de las administraciones públicas, plantearles sus necesidades y pedirles ayuda para poner en marcha iniciativas que frenen los cierres. En este sentido, Alberto del Burgo alaba la decisión del Ayuntamiento de Palencia de modificar la ordenanza reguladora de terrazas para que puedan seguir ocupando espacios de uso público hasta el 31 de diciembre y aliviar así las pérdidas económicas que ha sufrido toda la hostelería desde marzo de 2020.

Aunque, sin duda, la mejor ayuda, es que se recupere la normalidad y que los clientes puedan volver a disfrutar de bares, restaurantes, discotecas sin miedo al contagio. «Estoy convencido de que cuando se acabe la pandemia todo volverá a ser como antes», afirma del Burgo. Pero hasta entonces considera fundamental también articular otras medidas, a nivel nacional, regional o local, facilitando la aplicación de los ERTE y la llegada de ayudas, y evitando la confusión que se ha quedado instalada en estos negocios donde ni la clientela, ni los propietarios saben ya a qué atenerse. «Solo pedimos que nos dejen trabajar», insiste del Burgo que, como el resto del sector, se enfrenta también a una brutal subida de los costes. «Hoy pagamos tres veces más por todo y ganamos la mitad», asegura este hostelero que lleva 18 años detrás de una barra y que todavía hoy sigue trabajando a medio gas, como casi todo el mundo. «No creo que haya un solo hostelero al que le vaya bien», insiste. Por eso es fundamental asociarse y ser más fuertes para defender a los profesionales del sector y con ello, ofrecer un mejor servicio a los clientes, reitera.

Sin embargo, el presidente de la CEOE de Palencia, José Ignacio Carrasco, que siempre ha impulsado el acercamiento de las dos asociaciones de hostelería de Palencia, se mostró muy crítico con la creación de Hostelería de Palencia, al entender que divide al sector.

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