La plantilla de médicos en la provincia se reduce un 30% en verano

Y muchos de los nuevos veraneantes que llegan con la época estival son niños, que se accidentan en la bicicleta o en la piscina, además de las patologías de la época o los insectos. «El verano es complicado porque las plantillas de médicos decrecen una tercera parte, caen alrededor del 30%, pero la población de los pueblos crece», señala Santiago de la Fuente, médico de Atención Primaria en Astudillo y vocal de Medicina Rural de Palencia.

La plantilla de médicos de la provincia, que se reduce en verano, tampoco está durante el invierno al 100% al no haber suficientes profesionales para cubrir todos los puestos vacantes. Por este motivo, han tenido que cerrarse algunos consultorios de la provincia al no haber personal suficiente para acudir a los mismos. Los centros de salud también han reducido estos últimos tiempos los profesionales de guardia de dos médicos a uno, junto con una enfermera, así que si tienen que salir para atender alguna urgencia, como por ejemplo un accidente, hay que esperar hasta que vuelvan los sanitarios o acudir al más cercano si urge.

Una solución que ha encontrado la Junta, que ya usó el verano pasado, es trasladar a demanda a los pacientes donde no funcionan los consultorios hasta los centros de salud de la provincia mediante un taxi, que va vinculado a la cita médica del centro de salud y que tiene horario de 10 a 15 horas. «Hemos habilitado el transporte en los municipios de Buenavista y Congosto, pero van a ser algunos días sueltos, mientras esté el médico de vacaciones», explica el delegado de la Junta en Palencia, José Antonio Rubio Mielgo. En total, serán quince días divididos entre los tres meses de verano. Por su parte, la Asociación de Vecinos Buenavista de Valdavia y el propio alcalde, Héctor Marcos, han criticado mucho que no se mantenga la atención presencial del médico en el propio pueblo.

Este servicio de transporte también está contratado en los municipios que pertenecen al área básica de salud de Herrera de Pisuerga por el plazo de un mes. Actualmente, la plantilla herrerense cuenta con tan solo seis médicos de catorce, por lo que los facultativos no están pudiendo coger más de una semana consecutiva de vacaciones.

Este problema que se incrementa en verano tiene difícil solución al no haber suficientes médicos. Y es que el 28% de los doctores de Atención Primaria del medio rural se jubilarán en los próximos cinco años. Además, la edad media de estos profesionales supera los 50 años, solamente el 14% de este colectivo que trabaja en los pueblos tiene menos de cuarenta años y casi la tercera parte de esta amplia plantilla supera los 60 años. Y este problema, que afecta a nivel nacional, tiene especial incidencia en las comunidades más ruralizadas, como son Castilla y León junto con Castilla-La Mancha y Aragón.

A las vacaciones y descansos además se suman las bajas, que también ahondan en la herida de las plantillas reducidas. Desde que arrancó la pandemia, el número de bajas laborales no ha dejado de crecer. Según datos basados en el INE (Instituto Nacional de Estadística), un millón de personas no acude a su puesto de trabajo cada día y la plantilla de inspección para gestionar las bajas en Palencia está actualmente por debajo del 50%, al haber solo dos profesionales de cinco.

Una de las opciones para paliar la falta de facultativos, junto con la llegada de los MIR, son los profesionales extracomunitarios. La provincia cuenta con más de una docena ya, sobre todo en la zona norte, la más castigada por la falta de médicos al estar más lejos de la capital, pero en otros puntos de la geografía española son mucho más numerosos ya. En Canarias, el 80% son extranjeros y Burgos tiene más de 50 médicos extracomunitarios. «Es lo que salva la situación que tenemos», sentencia De la Fuente.

«Este año estamos mejor que el año pasado, aunque julio está siendo regular», reconoce Rubio Mielgo. «Durante el mes de agosto va a venir a Guardo un médico andaluz que va a hacer aquí el rotatorio. Son profesionales que vas captando y parches para tener a todo el mundo medianamente satisfecho», agrega.

Los médicos rurales claman por poder formar a residentes en las zonas rurales. Ese es uno de los principales problemas, ya que al no conocer el trabajo diario que se puede llevar a cabo en los pueblos, nadie pide posteriormente trabajar en el medio rural como destino. «Tendría que ser obligatorio formarse en la zona rural, si alguien lo hace aquí se enamora. Hay que tener centros buenos y mejorarlos», asevera el vocal de Medicina Rural de Palencia.. Y es que el 85% de los encuestados en el estudio del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos se siente a gusto con su ejercicio profesional y en su lugar de trabajo y el 90% de los mismos se considera médico rural.