Palencia

Paredes de Nava ahonda en su pasado vacceo a través de la arqueología

«Esta es la novena campaña de excavación en el yacimiento de 'La ciudad' de Intercatia. Durante los primeros años, intervinimos en diferentes puntos del recinto urbano, fundamentalmente en el interior. Así pues, descubrimos restos de las viviendas de la era romana y la estructura del primer recinto defensivo de época vaccea. En este último tiempo, entre la pandemia y 2022, nos estamos centrando en el recinto defensivo exterior», explica Javier Abarquero, codirector del yacimiento.

La ciudad tiene más de 50 hectáreas de dimensión y está rodeada por dos recintos defensivos: uno interior y otro exterior. «Ahora estamos descubriendo la cara externa de la muralla, que tiene un poco de talud y se conserva a una altura de más de tres metros. Asimismo, está precedida de un pequeño foso, otra antemuralla, y un refuerzo exterior de solo un metro», expuso Abarquero. «Además, hemos descubierto una especie de documentos jurídicos, que podrían ser un pacto entre dos personas, lo que sería una garantía de que te iban a recibir bien en la ciudad. Esto es una muestra de que aquí está Intercatia», añadió el investigador.

La muralla está construida a través de capas de arcilla, barro compactado e incluso ceniza. Es decir, «el sistema constructivo es muy peculiar, de hecho no se había documentado en otros yacimientos hasta la fecha. Además, inaugura la arquitectura de tierra, algo tan característico de Tierra de Campos», añade el codirector.

El yacimiento de Intercatia está inviertiendo la mayoría de sus esfuerzos en un gran foso. «El año pasado, creíamos que no era muy profundo, pero hemos seguido picando hacia abajo y aún no hemos dado con el fondo», detalló Abarquero. A este trabajo, los arqueólogos han añadido una pequeña cata cerca del espacio que están excavando para intentar documentar sobre un gran torreón adosado a la muralla. «Todo esto lo habíamos detectado a través de la prospección geofísica que nos marca las pautas de donde podemos intervenir o sondear con más posibilidades de éxito», señaló el arqueólogo.

Los arqueólogos comenzaron a trabajar en la parte externa de la muralla en 2018, aunque durante 2020, 2021 y 2022 avanzaron muy poco, debido a las restricciones sanitarias. Son cuatro semanas del verano las que utilizan para ejecutar su labor, pero durante la pandemia tuvieron que trabajar sin campo de voluntarios y en menos tiempo, tan solo 15 días.

Este año han vuelto a la normalidad y cuentan con un total de 22 voluntarios jóvenes, cuyas edades deben oscilar entre los 18 y los 30 años. «Son muy variados, estudian diferentes carreras, de hecho no hay ninguno que se vaya a dedicar a la arqueología en un principio. Algunos estudian Humanidades, otros Historia del Arte, Filologías... Además, no solo proceden de Castilla y León, sino también de otras comunidades españolas como Asturias, Cantabria, Andalucía o Islas Canarias», asegura Javier Abarquero.

Lucía Sánchez y María Alegre son dos de esas voluntarias que decidieron adentrarse en el mundo de los yacimientos a pesar de estudiar Historia del Arte. «Nos interesa bastante el patrimonio cultural y la arqueología, además nos llamaron la atención las actividades asociadas al voluntariado», destacan las jóvenes. «Es un mundo que no llega tanto a la gente joven, aunque esta campaña ha contado con muchos voluntarios de 18, 19 y 20 años», añaden las madrileñas.

Aparte de los cuatro codirectores y el grupo de voluntarios, Intercatia cuenta con un equipo de arqueólogos experimentados que colaboran en las labores de investigación del yacimiento. «Nos ayudan a controlar a los voluntarios, cada uno se ocupa de un espacio y les va ordenando las determinadas tareas», aseguró Abarquero.

El trabajo diario de los voluntarios en el yacimiento varía mucho en función del lugar que les toque ocupar. «A lo mejor tienen que coger un pico por primera vez. Les vamos rotando, de zonas más complicadas a otras más sencillas. Una de las tareas habituales consiste en cribar la tierra para ver si hay algún elemento importante», detalló el codirector de La ciudad. Los expertos enseñan a los aprendices a través del conocimiento de las técnicas y las fórmulas de registro. «En líneas generales, se van con una buena experiencia y además, forjan amistades», añade.

«La aportación de la Junta es a través del campo de voluntariado. Por la mañana, realizan su aportación y por la tarde, tienen diferentes actividades a lo largo de toda la provincia. Se trata de una experiencia maravillosa que puede convertir a Palencia en su lugar de futuro laboral. El objetivo es que siga creciendo esta actividad social y económica a nivel turístico», explicó José Antonio Rubio, delegado de la Junta de Castilla y León en Palencia.

La idea de investigar en el yacimiento de 'La ciudad' surgió gracias a José Herrero, un paredeño que fundó en 2007 la asociación 'En Busca de Intercatia'. «Estuve investigando durante varios años en la Biblioteca Nacional de Madrid sobre su historia. Por ello, decidí venirme a Palencia para hablar con los arqueólogos. Llevamos más de 20 años investigando sobre estas excavaciones y necesitamos ánimo y apoyo para poder continuar», afirma Herrero a pie de excavación.

Asimismo, Javier Abarquero destaca que «es muy importante conocer las raíces y saber de dónde procedemos. Todos los yacimientos son interesantes, pero tienes que contar con un equipo de arqueólogos que muestre interés en la investigación». Los expertos consideran que «es fundamental que las administraciones se impliquen; la Junta de Castilla y León y la Diputación de Palencia se involucrarán siempre que haya un equipo que tire hacia adelante y sobre todo, si el municipio está dispuesto a colaborar y quiere formar parte del proyecto».