Palencia

El electricista que ayudó a usar el 'electroshock' en España

En sus casi 135 años de historia, el Centro Sociosanitario Hermanas Hospitalarias de Palencia ha ido adquiriendo los mejores materiales y el óptimo equipamiento médico y de enfermería que, con los avances técnicos producidos en la asistencia, se ha ido sustituyendo por otros más modernos. En 2006 se puso en marcha una exposición permanente que recoge parte de la historia en la atención a las personas con enfermedad mental. Esta exposición, 'Una mirada al pasado', se ubica en una de las instalaciones que mejor han conservado la esencia del antiguo Hospital San Luis y permite al visitante observar la evolución histórica de la asistencia psiquiátrica y disfrutar con la contemplación de aparatajes, materiales, documentación gráfica y recreaciones de instalaciones como quirófano, gabinete oftalmológico o sala de dentista.

«Se empezó a hacer psiquiatría como tal a mediados del siglo XIX más o menos, y el gran salto es a mediados de los años 50 del siglo XX, cuando llegan los primeros psicofármacos. Había influencias francesas de Phillippe Pinel o alemanas, pero psiquiatría en España, con personas potentes, había muy poco. Aquí en Palencia teníamos un director médico de la casa que, si tenemos que hablar de la psiquiatría en España, hay que hablar de él: el doctor Luis Martín Istúriz. Este señor es uno de los seis editores de la primera revista que habla de psiquiatría en España, que se llama Revista Frenológica Española. En Palencia, en centros como este, la psiquiatría evolucionó, en el museo se ven cosas que en aquella época eran los avances técnicos y un hospital de estas características era un lujo tenerlo», subraya Javier Arellano, director gerente del Centro Sociosanitario Hermanas Hospitalarias de Palencia.

«Era hospital general, laboratorio, quirófano, sala de odontología... Aquí las hermanas atendían de manera integral», señala Javier Arellano, mientras muestras objetos relevantes del museo como un microscopioLeitz de 1913 o una camisa de fuerza procedente de Mondragón, pues en Palencia nunca llegaron a usarse. Pero la 'joya' de la exposición es, sin duda, un aparato de 'electroshock' ideado por Alfredo Prieto Vidal, discípulo de Martín Istúriz.

«En 1938, en esa época resurgen grandes teorías de psicoanálisis y hay una formación en Italia. De España fueron algunos psiquiatras con un señor que se llamaba Ugo Cerletti, que era un potente psiquiatra italiano, y descubren allí una terapia que se estaba haciendo en Italia para las personas que no respondían a ningún tipo de terapia: la electro-convulsiva, que consigue que las personas que no responden a ningún tipo de alternativa terapéutica duerman unas horas y se despierten bien, sanas, reseteadas y dejen de tener conductas extrañas. Cuando Prieto Vidal viene de Italia, le cuenta al electricista de la Fábrica de Armas lo que ha visto para que le ayude a hacerlo igual, le construye un aparato y empiezan a dar la terapia electro-convulsiva. Nosotros decimos que Palencia es el primer centro de España donde se aplica la terapia electro-convulsiva, que hoy sigue en boga, no es otro de los mitos como la camisa de fuerza», agrega Javier Arellano.

En el quirófano del museo, cuya última operación data de 1977, una apendicitis en un fin de semana, se pueden ver autoclaves para la esterilización «y como no había sedación, se trabajaba con bolsas de tripas de cordero para evitar la hiperventilación, detalla Javier Arellano, al tiempo que subraya como José Luis Gutiérrez Herrero, director médico desde 1964 hasta los años 80, fue quien hizo la segunda gran transformación del centro hasta los años 90.

«Él edita el libro de Casa de Salud a Complejo Hospitalario, hace la evolución de la psiquiatría manicomial a una moderna, donde ya aparecen los psicofármacos. El primer fármaco aparece en 1957, con lo que la esperanza y la calidad de vida se multiplican exponencialmente», destaca Javier Arellano, mientras señala un test Rorschach de Nueva York que se utilizaba para elaborar el perfil psicológico. La visita concluye con la contemplación de una bañera que fue hallada durante unas obras de rehabilitación cuando se desprendió un falso techo. Tiene orificios por los que se creaban burbujas en el agua para que las enfermas, en cuclillas, se relajaran.