Los centros sociales de Palencia se abren como aseos para los controladores de la ORA
La empresa Dornier ha solicitado que sus trabajadores puedan hacer uso de los baños mientras se mantenga el cierre de la hostelería
El cierre de la hostelería no solo afecta directamente a los profesionales del sector, sino que conlleva consecuencias para buena parte de la sociedad. Los comerciantes insisten en que el daño económico se extiende a sus negocios y otros muchos trabajadores también se ven obligados a modificar sus hábitos, a cambiar costumbres como la del café de media mañana, el pincho de tortilla o el menú del día.
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Todo esto o bien ha sido sustituido por el 'tupper' casero o la fiambrera o bien por la cada vez más extendida moda del 'take away', ese modelo anglosajón de la comida para llevar que se ha tenido que introducir de sopetón en las costumbres de muchos trabajadores palentinos.
Pero los problemas del cierre de los bares van más all de las dificultades para tomar un café o para encontrar un lugar donde comer. La hostelería se ha convertido también en un gran aliado de un buen número de trabajadores que se ve obligado a pasar, por diversas circunstancias, mucho tiempo en las calles. Así, además de ofrecer refugio en algunos momentos, permite además disponer de unos baños en los que hacer las necesidades o asearse mínimamente.
Y este problema afecta directamente en estos días a los trabajadores del servicio de la ORA, cuyo cometido les lleva a pasar largas horas recorriendo las calles, sin poder disponer, como consecuencia del cierre de la hostelería, de esos aseos que utilizaban de forma ordinaria.
La ciudad cuenta con algunos urinarios públicos, como por ejemplo en el parque del Salón o junto a la bolera de San Pablo. Pero son insuficientes, dado que las zonas reguladas por la ordenanza del aparcamiento son mucho más amplias.
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Ante esta situación, los controladores han pedido al Ayuntamiento que les ofreciese alguna solución, puesto que no pueden abandonar sus rutas para llegar a uno de estos aseos públicos o acercarse a las oficinas de la empresa en el caso de una necesidad urgente. Y desde el Ayuntamiento se ha querido ser sensible a esta petición, por lo que se ha autorizado el uso para los controladores de la ORA de los aseos con los que cuentan los centros sociales de los diferentes barrios o los centros de día de San Juanillo o La Puebla. Se da la circunstancia de que estas dos últimas instalaciones se encuentran también temporalmente cerradas al público como consecuencia de las medidas restrictivas para frenar la propagación de la covid-19. Por ello, la apertura será solo para el personal autorizado, como la plantilla del servicio de la ORA.
El Ayuntamiento ha dispuesto que también puedan utilizar los aseos de la planta baja de la Casa Consistorial en la Plaza Mayor, pero en todos los casos se ha insistido en que los usuarios de estos aseos públicos deben cumplir con todas las medidas sanitarias. Para ello, los trabajadores de la ORA deberán permanecer en todo momento con la mascarilla puesta y utilizarán gel hidroalcohólico al acceder a los edificios. Podrán también utilizar las máquinas de 'vending' de La Puebla.
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